El precio del aceite de oliva es una de las grandes preocupaciones de la población. Uno de los productos más básicos y fundamentales de la alimentación ha tenido un importante encarecimiento en los últimos años, y esto repercute, sobre todo, a los más vulnerables. Muchas familias con dificultades económicas tienen problemas para llenar la cesta de la compra, y esto solo agrava la situación.
El aceite ha pasado de ser un bien de primera necesidad a convertirse en un producto de lujo. Un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha informado que el precio del aceite ha crecido un 225% en los últimos 3 años. Los números son alarmantes, y reflejan de forma explícita el momento que se vive en España.
Todo el mundo quiere saber cuando se estabilizará el precio del aceite. Y, por suerte, parece que será pronto. El economista y profesor, Gonzalo Bernardos, ha lanzado un pronóstico optimista sobre ello.
Gonzalo Bernardos da buenas noticias: es posible que pronto baje el precio de aceite
Gonzalo Bernardos ha dicho que todo depende de la "producción de la campaña 2024-25, que empieza en octubre y la parte central, la de mayor recolección, es hasta febrero". El economista ha dicho que se necesitan varias cosas. "La primera, que haya llovido en primavera, y ha llovido".
"La segunda, que en el mes de mayo, que es cuando se produce la floración, que no haga mucho calor ni llueva mucho", ha proseguido Gonzalo Bernardos en su intervención. "A partir de aquí, como la planta ha tenido malas cosechas, tiene la capacidad de producir mucho más de lo que sería normal", ha señalado.
Tras su explicación, Gonzalo Bernardos ha dado una buena noticia. Todo depende, según ha aseverado, de tener "suerte", que se produzcan las características comentadas y de que "la producción supere el millón y medio". En ese caso, el economista afirma que "podremos ver el aceite de oliva virgen en enero de 2025 a 5 o 6 euros".
Dicho esto, Gonzalo Bernardos ha hablado sobre lo que puede suceder en lo que queda de año. "Lo que se ha producido en la campaña 2023-24 son 847.000 toneladas, y tiene que casi duplicarse. Es posible, porque normalmente, a una campaña buena le sucede una mala y viceversa".
"Hemos tenido dos muy malas", ha espetado. Por lo tanto, es posible que los ciudadanos se lleven una gran alegría con el precio del aceite a partir de enero.
No obstante, Gonzalo Bernardos ha dicho que, a partir del verano, todo puede cambiar. "Si los agricultores ven que la campaña será importante, empezarán a sacar las existencias almacenadas a mejor precio".