En tiempos de inflación y con los precios al alza, la compra de comestibles se ha convertido en un reto para muchos hogares. Los huevos, por ejemplo, han sufrido aumentos notables, y los recibos de supermercado reflejan un incremento cercano al 30 % desde 2019. Aun así, existen estrategias para seguir llenando la despensa sin vaciar la cartera.
Desde aprovechar las ofertas semanales de cadenas como Aldi hasta comprar al por mayor en grandes superficies, las opciones para ahorrar son variadas. Sin embargo, hay una tienda en Estados Unidos que destaca por mantener precios bajos de forma constante y por ofrecer productos únicos: Trader Joe’s.
Un básico gourmet que tiene un precio imbatible en Trader Joe's
Entre su selección ecléctica, Trader Joe’s ofrece snacks, congelados y básicos de despensa a precios que sorprenden. Muchos artículos cuestan menos de tres dólares, y algunas comidas preparadas, menos de cinco. Pero hay un producto que está llamando especialmente la atención de los amantes de la cocina: la mantequilla salada cultivada, hecha en Francia.
Este tipo de mantequilla europea se caracteriza por tener un contenido de grasa más alto que el de la mantequilla estadounidense, alcanzando entre un 82 % y un 90 %. Esa grasa extra se traduce en un sabor más intenso, una textura más cremosa y una experiencia gastronómica superior. El problema es que, en la mayoría de tiendas, su precio supera fácilmente los seis dólares.
En Trader Joe’s, la versión francesa se vende por solo $4.99 el envase de 8.8 onzas. Frente a marcas como Kerrygold, que rondan los $4 por 8 onzas, la diferencia en precio es mínima, pero el salto en calidad es notable. Además, esta mantequilla proviene de Bretaña, una región reconocida por su tradición láctea.
Sabor, textura y versatilidad en la cocina
El secreto está en que es mantequilla “cultivada”. Antes de batir la crema, se añaden cultivos vivos y se deja fermentar durante al menos 24 horas. Esto produce un sabor ligeramente ácido, similar al de la crème fraîche, que aporta complejidad a cada bocado.
Su perfil la hace perfecta para untar en un pan crujiente, realzar un filete recién sellado o transformar recetas de repostería como galletas de mantequilla y bollos. Eso sí, al ser salada, conviene ajustar la cantidad de sal en las preparaciones.
La comparación con la prestigiosa Beurre de Baratte francesa no es exagerada. Esta última suele costar entre $8 y $15 por media libra, pero la opción de Trader Joe’s ofrece una experiencia muy similar por menos de cinco dólares. No es solo una compra inteligente, sino un verdadero placer gastronómico al alcance de más bolsillos.