El Athletic Club no solo debe preocuparse de encontrar jugadores que le mejoren aún más el nivel competitivo de la plantilla, sino de retener a los que ya tiene. Los vascos están realizando un comienzo de temporada muy bueno y, llegando al ecuador del curso, están quintos a tan solo tres puntos de la Champions League. Esto es en parte gracias al fondo de armario de calidad del que dispone Ernesto Valverde, pero el mercado de invierno lo amenaza.
Nico e Iñaki Williams están siendo muy importantes, pero el hecho de que haya gente capaz de darles aire y que también den buen rendimiento es clave. El inconveniente es que los futbolistas quieren jugar, y Asier Villalibre no se conforma con ser un suplente de garantías.Ernesto Valverde ha contado con él en ocho partidos y la Copa del Rey, marcando tres goles, pero a sus 26 años quiere ser más protagonista.
El curso pasado ya tuvo que salir en invierno tras participar muy poco en la primera vuelta, y ahora parecía que era su momento. Destacó en el Alavés en Segunda División e incluso hizo el gol definitivo del ascenso en el añadido de la prórroga de la final. El conjunto de Luis García Plaza se lo hubiera quedado, pero el Athletic Club insistió en repescarle.
Asier Villalibre tiene mercado
Ahora el Alavés ya tiene a Samu Omodorion, pero hay otros conjuntos interesados en su cesión. El que más fuerte apuesta sería el Sporting, que está peleando el ascenso directo y quiere hacer lo posible para conseguirlo. Los asturianos son un histórico atrapado en la categoría de plata y necesitan aprovechar la oportunidad de una temporada que les está saliendo muy bien.
Parece que la oportunidad de consolidarse en el primer equipo le está tardando en llegar a Asier Villalibre. Debutó en 2016 con 19 años, y tras pasar por tres equipos de Segunda y salirse en el Bilabo Athletic con 23 goles, se quedó definitivamente con los grandes. Cuatro temporadas en las que fue perdiendo protagonismo y solo consiguió ser importante con Marcelino García Toral, a pesar de cumplir siempre.
Con Ernesto Valverde ha caído en desgracia y Asier Villalibre quiere sentirse futbolista de verdad. Importante para su equipo como el curso pasado en Vitoria, y no una pieza más de refresco. Además, para el técnico navarro está por encima Guruzeta, que el año pasado ya tuvo mucho más protagonismo.
Salir del Athletic Club para volver más fuerte
Guruzeta es el ejemplo que trabajando bien se puede llegar. Él también destacó en el filial y, tras una primera cesión al Sabadell, se salió en el Amorebieta en Segunda y volvió a la disciplina vasca con la responsabilidad del gol. El año pasado metió seis dianas y en este ya lleva ocho en la mitad de partidos.
Asier Villalibre quiere demostrar fuera del Athletic Club que puede volver con galones. Si a Ernesto Valverde no le fue suficiente su rendimiento el curso pasado en Mendizorroza, vería con buenos ojos mudarse a El Molinón. Eso sí, para el técnico sería un dolo de cabeza perder a un futbolista valioso en la rotación.