En el año 1929 nace el Club Deportivo Palencia, siendo uno de los primeros clubes de la ciudad de Palencia. Un club que nace de un grupo de personas que tiene que pagarse sus propias camisetas y viajes con el dinero de sus bolsillos. Años después se unificará con el Fábrica Nacional de Palencia, por lo tanto nunca llegó a desaparecer.
Setenta años después los herederos de aquel club modesto, crean el Club Deportivo Palencia Balompié, un club del Siglo XXI, pero con la ilusión, la humildad, las ganas, el trabajo… de aquel club que nació en los años 20 del siglo pasado.
Nacen con la intención de ser grandes, pero ser grandes desde la humildad y el trabajo personal de cada persona que trabaja por sus colores. Quieren ser grandes, pero no a cualquier precio, no les vale todo.
Desechan cualquier tipo de negocio alrededor del fútbol (SAD´s, especuladores de sentimientos, vivir por encima de las posibilidades…); creen en un fútbol tradicional, cercano a las personas, cercano al aficionado, un club en el que todo socio se sienta participe de él, porque él es el dueño de su club, él puede tomar las decisiones en su club, él es parte del club.
En esta sociedad en la que vivimos en la que el capitalismo imperante hace llevar a cada persona por donde quiere, incluso en el fútbol, estos clubes intentan ser un oasis en el desierto del fútbol, en este mundo en el que lo único que manda es el dinero y la especulación. Por eso desde el Deportivo buscan un fútbol más auténtico, podría llamarse romántico, donde lo importante de todo es el deporte y la vida que lo rodea, un fútbol social.
El Deportivo, además es un club que cree en la solidaridad, en que un equipo de fútbol no se tiene que quedar en eso simplemente, tiene que colaborar todo lo que pueda con los problemas de nuestra sociedad, en el primer año han comenzado con el convenio de colaboración con la Asociación Contra el Cáncer.
Además en este segundo año, están haciendo una recogida de alimentos permanente en la que cada cierto tiempo se entregan a diferentes organizaciones de la capital palentina, en Navidad organizaron un torneo de fútbol base donde recogieron más de 1.000 juguetes para Cruz Roja.
Además, son un club que creen en la colaboración con otros clubes que sean como ellos, colaborar entre todos para cambiar este mundo del fútbol que tan corrupto se ha vuelto. Clubes que luchan contra el negocio en este deporte, que con la coordinación entre todos podemos ir consiguiendo cosas poco a poco.
La creación de este tipo de clubes, que cuentan con un gran grupo de personas que colaboran desinteresadamente con la vida diaria del club (en este caso, casi 40 personas), hace ver otra forma el fútbol actual, nos hace creer en que todo puede cambiar, en que hay esperanza.
La Fuerza de un Sentimiento.