Pep Guardiola logró sobrevivir ayer a un infierno blanco. El Bernabéu era una olla a presión y Vinícius Júnior se encargó de echar más leña al fuego, aunque las miradas están puestas en el de Sampedor.
Los citizens estaban ligeramente fatigados tras el enorme esfuerzo de ayer, y se esperaba que el catalán moviese ficha. Pero eso nunca ocurrió, y ahora todos se lo recriminan.
Está más que claro que Pep Guardiola es uno de los mejores entrenadores del mundo, por no decir el mejor, pero a veces toma decisiones que no agradan al público. Quizás, en su cabeza, tenía otro plan entre manos.
Pep Guardiola no quiso mover ficha
Los 11 que entraron como titulares en el Manchester City jugaron los 90 minutos y lucharon como guerreros ante las acometidas del Real Madrid. Los skyblues tuvieron el balón y las mejores ocasiones, pero los de Ancelotti tienen una motivación extra en la Champions League.
Un 'derechazo' de Vinícius Júnior puso el resultado a favor de los locales, y Kevin de Bruyne puso las tablas con un auténtico misil desde la frontal del área, imparable para su compatriota Courtois.
Los de Pep Guardiola dominaron el encuentro, pero durante la media hora final se pasaron más tiempo defendiendo que atacando, y eso pudo ser culpa del cansancio acumulado.
Haaland apenas tuvo contacto con el balón, y Grealish y Bernardo Silva no estuvieron precisamente brillantes. Es por ello que la afición pedía a gritos que entre gente de refresco, pero el de Sampedor hizo caso omiso.
Julián Álvarez, Phil Foden o Riyad Mahrez se quedaron en el banco de suplentes durante todo el partido y no pudieron saltar al césped del Bernabéu. 3 jugadores de talla mundial que por nivel y calidad serían titulares en cualquier otro equipo del mundo, excepto en el de Pep Guardiola.
Asimismo, en declaraciones posteriores al encuentro, el técnico aclaró que veía bien a los que estaban en el campo, y no quiso arriesgar, pese a haber pensado varias veces en hacer algún cambio.
Los citizens recibirán la semana que viene al Real Madrid con la esperanza de lograr pasar a la final y dejar atrás los fantasmas del pasado. Pep Guardiola quiere ganar la 'Orejona' fuera del FC Barcelona y hará todo lo posible para levantar el ansiado trofeo, aunque le cueste muchas críticas.