El Atlético de Madrid podría quedarse sin uno de los objetivos más deseados por Diego Pablo Simeone para reforzar su ataque. Hablamos de Antony, extremo brasileño del Manchester United, que parecía estar en el radar colchonero desde hace varios mercados. Sin embargo, el interés firme de varios clubes de Arabia Saudí amenaza con truncar ese sueño rojiblanco.
Las palabras del agente sobre su futuro
El propio agente del jugador, Junior Pedrosa, reconoció públicamente que están escuchando propuestas desde Oriente Medio. Según sus palabras, Antony está "abierto a trasladarse a Arabia Saudí" si el proyecto es atractivo. El entorno del futbolista cree que es el momento de tomar una decisión que combine lo deportivo con lo económico, y ahí es donde el fútbol saudí saca ventaja.

El Atlético de Madrid tenía claro que la operación no iba a ser sencilla. El Manchester United pretende recuperar parte de la inversión que hizo por Antony, por lo que su precio de salida rondaría los 40 millones de euros. Una cantidad fuera del alcance del club colchonero en estos momentos, salvo que se produjese una venta importante.
Se aleja de Atlético de Madrid
Además, el factor tiempo juega en contra. Mientras Simeone aprieta para cerrar la plantilla cuanto antes, Arabia acelera con cheques millonarios y contratos irrechazables. En ese escenario, el Atlético apenas puede competir. La idea inicial de una cesión con opción de compra también ha perdido fuerza frente al músculo económico de sus rivales.
Desde el club madrileño siempre se ha valorado el perfil de Antony. Su desborde, velocidad y capacidad de desequilibrio encajaban a la perfección en lo que Simeone busca para su delantera. Pero la realidad actual del mercado impone otras prioridades, y Arabia ha entrado con fuerza en la puja por el brasileño.
En el Manchester United no descartan que el jugador se quede si no aparece una oferta convincente. Pero el entorno del futbolista ya se mueve en otras direcciones. En Heliópolis, el Betis todavía sueña con repetir la fórmula del préstamo, aunque su presidente ha sido claro: el fichaje solo es posible si las cifras bajan drásticamente.