El Atlético de Madrid está licenciado en caer cuando todo parece de cara. Los rojiblancos atravesaban un gran momento de forma, pudiendo haberse colocado líderes del campeonato con un triunfo. Las Palmas era un equipo, a priori, asumible para lograr una nueva victoria, pero nada más lejos de la realidad.
Los jugadores de Simeone quisieron ganar el partido antes de jugarlo, algo impensable. No es la primera vez donde el Atlético sale al césped a verlas venir, jugando sin intensidad y, al parecer, sin ganas. Ese fue el problema ayer, el equipo rojiblanco se vio superior al rival y, por ello, terminó cediendo tres puntos que podrían ser claves.
Un error repetido mil veces
Ya ocurrió en Mestalla, pero parece que el Atlético de Madrid se empeña en repetir sus errores. Los rojiblancos saltaron a Gran Canaria tras una dinámica que hacía pensar que el equipo estaba para competir con cualquiera. Pero cuando un equipo piensa que va a ganar con el nombre todo le viene al revés, algo que le sucede a menudo al Atlético.
De hecho, no se vio un Atlético competitivo hasta casi el final del partido. Las Palmas se comió a los colchoneros, pudiendo haber marcado muchos más goles durante todo el partido. Cierto es que el equipo canario no tuvo grandes ocasiones, pero en el campo superó en todo a los de Simeone, trabajando mucho mejor.
Riquelme y Barrios, los mejores
Entre tantos puntos negativos, puede que demasiados, hay dos canteranos que sobresalieron. Riquelme y Pablo Barrios fueron los mejores del Atlético, liderando al equipo cuando todo estaba en contra de los rojiblancos. Riquelme dio la asistencia en el tanto de Morata, mientras que Barrios fue el dueño del centro del campo del Atlético.
Simeone, equivocado en el planteamiento
El Atlético lleva demasiados partidos jugando con los mismos jugadores desde el inicio. Muchos de ellos, como Griezmann, están con poco ritmo en los últimos partidos, algo parecido con Koke o Rodrigo de Paul. El técnico argentino debe apostar más por las rotaciones o muchos de los imprescindibles terminarán pasando por la enfermería.
Morata, en estado de dulce
Una de las cosas que han quedado claras esta temporada es el gran momento de forma de Morata. Muchos, la mayoría, de los aficionados rojiblancos dudaron de su nivel como goleador, pero el español ha sabido dar el salto exigido. Va camino de superar los 18 goles que le pedía Simeone y, veremos, si no llama la atención de alguno de los grandes de Europa.