Diego Pablo Simeone vuelve a tener motivos de preocupación en cuanto a las lesiones. El técnico argentino no ha podido contar este domingo con un futbolista clave en su rotación. En una zona tan delicada como la defensa, este podría ser un gran contratiempo para el entrenador del Atlético de Madrid.
Se trata de César Azpilicueta, quien, en las últimas horas, no se pudo ejercitar con el resto de sus compañeros. El navarro, que ya ha tenido algunos problemas con las lesiones esta temporada, tendría en el aire su presencia ante el Villarreal. Esta sería una mala noticia para el cuadro rojiblanco, que necesita contar con todos sus efectivos.
Azpilicueta no se entrenó por una sobrecarga
El central, que también se puede desempeñar como lateral, no pudo entrenarse con el grupo durante todo el fin de semana. Tal y como informa As, el ex del Chelsea se ha quedado fuera de las sesiones por una sobrecarga. Esto hace que sea duda para un choque que puede suponer un punto de inflexión para la entidad madrileña.
Samuel Lino, la novedad en el centro del campo
A la baja de Azpilicueta, hay que sumar la de Rodrigo de Paul, que se perderá el partido por acumulación de amarillas. Este contratiempo podría ser solventado con la aparición de Samuel Lino como interior, acompañando a Koke y Pablo Barrios. De acuerdo con lo que apunta Marca, el internacional brasileño tendrá un rol más ofensivo ante los de Marcelino.
Esto ha provocado que Marcos Llorente vuelva a desempeñarse como carrilero diestro. Hay que tener en cuenta que Nahuel Molina, titular usual en dicha posición, tampoco podrá estar por sanción, lo que genera que el madrileño regrese a dicha demarcación. Con esto, Simeone se ha topado ante un auténtico rompecabezas a la hora de elaborar su once en Castellón.
Rodrigo Riquelme, la gran novedad en el once
Asimismo, hay que destacar la más que posible presencia del centrocampista madrileño en el once. El paso adelante que ha dado Riquelme en los últimos encuentros no ha pasado desapercibido para un Simeone que siempre ha elogiado su actitud. A pesar de que, en algunos momentos, el ex del Girona no ha tenido un buen nivel sobre el campo, su técnico no desconfía.
Por ello, el preparador medita situarle en el carril izquierdo, teniendo a Lino por delante. Una pareja explosiva que puede generar estragos en la defensa del Villarreal, que busca dar un golpe de efecto en el torneo doméstico. Con la meta de sumar más puntos fuera de casa, su principal punto débil, el Atlético tiene que dejar claro que se merece estar en la Champions la próxima temporada.