A pesar de la repentina lesión de Axel Witsel, distante desde que arrancase la Eurocopa, y de la ausencia de Arthur Vermeeren, espectador en el banquillo, Bélgica ya está en octavos. El 0-0 ante Ucrania en el día de hoy les vale a los de Dominico Tedesco para ser segundos de su apretado grupo. Su rival en la siguiente ronda será la Selección francesa, a la que los belgas quieren doblegar para seguir haciendo historia.
Ojo con Bélgica
Si bien ha sido una fase de grupos descafeinada por parte de los "Red Devils", los de Tedesco siempre son un combinado correoso y repleto de grandes futbolistas. Con un Kevin De Bruyne bastante inspirado, Bélgica aspira a llegar a las fases finales del torneo, rondas donde lleva décadas sin presentarse. Con una de las mejores generaciones de su historia, si no la mejor, los belgas se postulan como una de las rivales a batir para levantar el trofeo el día 14.
Sólidos en defensa, a pesar de las arremetidas finales del sonado delantero ucraniano, Artem Dovbyk, los belgas lograron dejar la portería a 0 por segundo encuentro consecutivo en esta Eurocopa. Siendo Ucrania un equipo que muchos calificaban como "El Tapado", Bélgica ha sabido aguantar el resultado y se mete en el lado de la muerte del cuadro de la competición. Aunque no sea un camino para nada fácil, los belgas prometen dar guerra hasta el final e intentar seguir su andadura en el torneo.
Sin Witsel, pero a octavos
Aunque el sistema 4-3-3 no es el ideal para el belga, Axel Witsel hubiese sido un futbolista relevante en su regreso a la Selección de no ser por su desafortunada lesión. Con su posible presencia en los octavos aún en el aire, Witsel se entrena en solitario para poder volver a formar parte del equipo belga lo antes posible. Por el momento, el veterano futbolista rojiblanco contempla las proezas de su país lejos del terreno de juego.
Vermeeren, afiliado a los banquillos
A sabiendas del poderío belga en la medular, Vermeeren espera pacientemente su oportunidad de formar parte del equipo en el devenir del campeonato. Consciente de su rol ocasional, al igual que en el Atlético de Madrid, Vermeeren trabaja como el que más para intentar convencer a Tedesco de que le alinee en el torneo. Ilusionado por la llamada de su país, Arthur seguirá esforzándose para ser importante con Bélgica y el Atlético.