El mercado de fichajes ya se calienta y uno de los nombres más codiciados es el de Viktor Gyökeres. El delantero sueco del Sporting CP será la bomba del mercado, despertando el interés de varios gigantes europeos. Entre ellos, el Atlético de Madrid, que lo ve como un refuerzo ideal para revitalizar su ataque. Sin embargo, la irrupción del Arsenal en la puja ha encendido todas las alarmas en el Metropolitano.
El Arsenal se lanza a por él
Según medios ingleses, el club londinense ha dado un paso al frente. Andrea Berta, flamante director deportivo de los gunners, ya ha iniciado contactos directos con el entorno de Gyökeres. La intención es clara: cerrar cuanto antes una operación que consideran estratégica para el futuro del equipo de Mikel Arteta, que busca un delantero centro dominante para completar su proyecto.
En el Atlético de Madrid no pierden de vista la situación. Diego Simeone lleva tiempo buscando un delantero potente y con gol, un perfil que Gyökeres encarna a la perfección. Con 26 años y una temporada estelar en Portugal, el sueco ya estuvo en la agenda rojiblanca en invierno. Su nombre volvió a sonar con fuerza en las últimas semanas, pero la ofensiva del Arsenal podría dejarles fuera de la carrera.
Un alto precio
La cláusula de rescisión del atacante ronda los 100 millones de euros. A pesar de ello, el Arsenal cree que puede cerrar el fichaje por una cifra cercana a los 70 millones, gracias a la predisposición del jugador. Gyökeres ya habría dado luz verde a su posible llegada a Londres, lo que complica aún más las opciones colchoneras.
El Atlético de Madrid necesita refuerzos en ataque. Simeone necesita jugadores diferenciales y en su agenda, Gyökeres aparecía como una de las grandes prioridades. Su potencia, movilidad y olfato goleador encajaban en el estilo de Simeone, que valora perfiles físicos y con capacidad para jugar de espaldas y al espacio.
En este contexto, la presión del Arsenal podría precipitar los movimientos del club rojiblanco. Si quieren competir por Gyökeres, deberán mover ficha pronto o cambiar el foco hacia otros objetivos. La competencia en el mercado será feroz y cada semana que pase juega en contra.