Dos hombres con trajes formales conversando en un entorno difuminado.

Gil Marín tiene dos nombres en la rampa de salida: Simeone lo sabe y ninguno es Lemar

Rodrigo Riquelme y Reinildo Mandava, en la cuerda floja.

El Atlético de Madrid ya perfila su estrategia para el mercado de enero, con un plan bien definido que incluye dos refuerzos y dos salidas. Carlos Bucero y Diego Pablo Simeone, un tándem perfectamente compenetrado. Ellos han trazado esta hoja de ruta con un claro objetivo: mejorar la competitividad del equipo en las áreas donde más lo necesita.

Un hombre con traje oscuro gesticula en un evento deportivo.
El Cholo Simeone con el Atlético | Europa Press

Refuerzos estratégicos: un centrocampista y un jugador de banda izquierda

El técnico argentino ha identificado dos prioridades claras, según informaciones de Tomeu Maura, de OK Diario. Por un lado,  un centrocampista defensivo, un clásico "cinco", que refuerce la medular. Aunque Rodrigo de Paul y Pablo Barrios han mostrado un buen rendimiento, Simeone busca un perfil que aporte equilibrio y profundidad en esa posición, sin necesidad de que sea titular indiscutible.

Por otro lado, el flanco izquierdo se ha convertido en el verdadero quebradero de cabeza para el Cholo. Ni Lino ni Riquelme han alcanzado el nivel esperado, mientras que las aportaciones de Galán y Reinildo tampoco terminan de convencer. Por ello, el club baraja dos opciones: un lateral izquierdo capaz de desempeñarse como carrilero o un jugador más ofensivo, similar a Yannick Carrasco.

Un jugador de fútbol con el uniforme del Atlético de Madrid en el campo.
Reinildo con el Atlético | Europapress

Las salidas: la doble 'R'

En el capítulo de bajas, Rodrigo Riquelme es uno de los nombres a tener en cuenta. Su prolongado estado de baja forma ha reducido notablemente su valor de mercado, y la dirección deportiva trabaja en encontrar una solución. Sin embargo, el club es consciente de que al ser canterano, es más complicado que salga debido al vínculo emocional que hay.

Riquelme
Riquelme con el Atlético | Europa Press

Reinildo Mandava aparece como otro de los principales candidatos, aunque su situación es muy diferente. El contrato del mozambiqueño vence en junio de 2024 y su rendimiento dista de ser el de cuando llegó a Madrid. De todos modos, el Atlético no está dispuesto a malvenderlo, por lo que su salida dependerá de encontrar un comprador interesado.

Una carrera contra el tiempo

Con el inicio de diciembre, el club trabaja contrarreloj para cerrar estos movimientos antes de finales de enero. La necesidad de cumplir con el límite salarial condiciona las decisiones, pero tanto Bucero como Simeone tienen claro que los refuerzos. Por ello, deben llegar cuanto antes para afrontar los compromisos de  Champions y Copa del Rey  con una plantilla completa.

Aunque los nombres definitivos están sujetos a las oportunidades que ofrezca el mercado, el Atlético se prepara para realizar un esfuerzo económico importante. Estos movimientos son solo ajustes para esta ventana invernal, con la mirada puesta en un mercado estival que promete ser aún más ambicioso.