El mercado de fichajes nunca da tregua y el nombre de Jadon Sancho vuelve a estar en el centro de la polémica. El extremo inglés, uno de los jugadores más desequilibrantes de Europa cuando está en forma, parecía tener su futuro encaminado hacia un nuevo destino. Sin embargo, un giro inesperado ha cambiado por completo el escenario y su fichaje vuelve a estar en el aire.
La situación parecía clara: el jugador quería un cambio de aires para recuperar continuidad y volver a brillar en un gran escenario. Equipos como la Roma y el Atlético de Madrid habían mostrado interés, pero el principal obstáculo no es deportivo, sino económico. Su ficha es demasiado elevada para los estándares de ambos clubes y eso complica cualquier operación.

El futbolista está decidido a no rebajar demasiado sus pretensiones salariales, convencido de que su talento lo avala. Pero el mercado actual no perdona, Los equipos que habían mostrado interés se han topado con la dura realidad: el problema de su salario es un muro difícil de derribar. Sancho deberá replantearse sus condiciones o corre riesgo de quedarse sin minutos, en el United no cuenta.
La Roma se planta y lanza un ultimátum
Desde Italia, la Roma había sido la primera en moverse, Gian Piero Gasperini veía en Jadon Sancho un refuerzo ideal para dar un salto de calidad en ataque. El equipo 'Giallorossi' incluso llegó a iniciar conversaciones para valorar la viabilidad de la operación. Pero la respuesta del jugador no convenció a la directiva.
El conjunto de Gasperini no está dispuesto a hipotecar su presupuesto con un contrato tan elevado, la dirección deportiva romanista entiende que el valor del futbolista es alto. Aunque no tanto como para tener que desajustar la economía del club, por eso, ya han hecho saber a su entorno que el tiempo de espera se acaba.
La Roma pide una respuesta
En el Olímpico quieren una respuesta inmediata. O Sancho acepta rebajar sus pretensiones en los próximos días o el club se retirará de la puja y cerrará otras opciones que ya tiene sobre la mesa. La paciencia se agota en Italia y el jugador podría perder una de las mejores oportunidades que tenía para relanzar su carrera.
En el Metropolitano la postura es distinta, pero también muy clara, Simeone necesita un refuerzo diferencial para el ataque. El técnico argentino lleva tiempo reclamando un jugador capaz de marcar diferencias en la banda, y Sancho encaja perfectamente en ese perfil. El problema vuelve a ser el mismo: la ficha del jugador, el Atlético de Madrid no va a cometer errores pasados ni poner en riesgo su estabilidad financiera.
Si Sancho quiere jugar en el Metropolitano, deberá aceptar un contrato ajustado a la realidad económica del club. De lo contrario, la operación se quedará en un simple rumor, el futuro de Jadon Sancho se resolverá en los próximos días. La Roma presiona, el Atlético espera y el jugador se encuentra en una encrucijada, o baja sus pretensiones o difícilmente salga del Manchester United.