El Atlético de Madrid vive días de máxima tensión en el arranque de temporada. Los resultados en LaLiga han encendido las alarmas entre la afición. Simeone, otra vez en el centro de todas las críticas, busca soluciones urgentes para levantar al equipo.
La presencia de Julián Alvarez sigue siendo uno de los pocos motivos para creer. El delantero argentino afronta su segunda campaña en el Atlético de Madrid. Con trabajo y sacrificio, se ha consolidado como un futbolista clave en el sistema de Simeone.
El fichaje que nunca se cerró
Durante el pasado mercado, el club intentó reforzar también su defensa. El gran objetivo fue Cuti Romero, compañero de selección de Julián Alvarez. Sin embargo, el acuerdo con el Tottenham nunca se cerró y la operación se esfumó.
En las últimas horas ha aparecido en redes sociales una imagen que ha desatado la conversación. Julián Álvarez aparece abrazado a Cuti Romero en la concentración argentina. Una foto que muchos aficionados del Atlético de Madrid interpretaron como una oportunidad perdida.
Reacciones de la afición colchonera
Los seguidores colchoneros no tardaron en compartir sus sensaciones. En redes, varios apuntaron que ver juntos a Julián y Cuti en el Metropolitano habría sido un sueño. Otros mostraron resignación, convencidos de que el club perdió una ocasión irrepetible para reforzar la plantilla.
La conexión entre ambos jugadores es evidente en la selección argentina. Su complicidad sobre el césped se ha trasladado a la amistad fuera de los estadios. El Atlético de Madrid, mientras tanto, observa con frustración cómo un deseo de verano terminó en nada.
Simeone sabe que el equipo necesita más solidez en defensa y más pegada en ataque. Julián Alvarez ha cumplido con su rol, pero no basta para sostener los partidos. La ausencia de un refuerzo como Cuti Romero pesa especialmente en los momentos decisivos.
Un inicio muy preocupante para Simeone
El empate frente al Alavés volvió a evidenciar los problemas del equipo. El Atlético de Madrid suma únicamente dos puntos de nueve en LaLiga. Se trata de uno de los peores inicios de la era Simeone al frente del banquillo rojiblanco.
El técnico argentino afronta uno de los desafíos más duros desde su llegada en 2011. Algunos aficionados piden cambios drásticos, incluso la salida del entrenador. Otros llaman a la calma y recuerdan la capacidad de reacción histórica del equipo.
Por ahora, la imagen de Julián Álvarez y Cuti Romero ha despertado sentimientos encontrados. Orgullo por tener a un delantero consolidado y frustración por no fichar a un central de élite. El Atlético de Madrid sigue en busca de soluciones para enderezar una temporada que comenzó torcida