El encuentro entre el Inter de Milán y el Atlético de Madrid estuvo marcado por numerosas situaciones. El trato de las autoridades a los aficionados colchoneros fue una de ellas, dado que la masa social denunció las condiciones en las que estuvieron antes de entrar.
Seguidores presentes en Milán afirmaron que se les metió en una “ratonera”, después de haber sido enviados al Metro. Esto, después de haberles tenido retenidos media hora durante el corteo. Todo ello, a poco más de 20 minutos para que comenzara el partido de la máxima competición continental disputado en Italia.
Un aficionado del Atlético denuncia el mal trato sufrido en Milán
Esto es Atleti ha tenido acceso al testimonio de un hincha del Atlético que denunció todo lo sucedido. Dicho aficionado afirmó que le “denegaron la entrada porque decían que era falsa” y expresa que hasta un directivo acudió para desmentir dicha versión. Este miembro del club afirmó que su entrada estaba en la base de datos que ellos manejaban, como forma de control a todos sus aficionados.
A pesar de la ayuda de este dirigente, se le negó la entrada y no pudo acceder al estadio. De hecho, hay que resaltar que su hermano, quien sí pudo entrar en el Giuseppe Meazza, salió del recinto para poder ver con él el encuentro entre Inter y Atlético. Ambos tuvieron que verlo desde el móvil, debido a que el primero no pudo acudir.
Las condiciones en las que tuvieron que entrar los seguidores colchoneros, denunciadas
Otro de los puntos en los que se quiso centrar dicho aficionado es en el tratamiento de los miembros de seguridad del Inter. Según su testimonio, en cuanto lograban superar la puerta, “muy pequeña”, había empujones y agarrones. Todo esto a la hora de cachearlos, porque había “cinco personas para mirar el DNI y la entrada” de 3.500 personas, las que acudieron al también conocido como San Siro.
Este seguidor quiere recalcar que dichos agarrones y empujones se produjeron sin motivo, ya que no se hizo “absolutamente nada”. Después de recorrer cuatro kilómetros, comenzados a las 18.00 de la tarde, su esfuerzo no valió la pena, ya que tuvo que ver desde fuera del coliseo interista la derrota rojiblanca.
Las pérdidas económicas y la ayuda del club, otros de los puntos clave
Este aficionado, que hizo un gran sacrificio para ir a apoyar a los suyos, sufrió duras pérdidas económicas. Tal y como relata, se gastó 60 euros en la localidad, 333 en el vuelo y 160 en el hotel. Según sus palabras, el Atlético ya se ha puesto en contacto con él para que se le pueda abonar el precio de la entrada.
De hecho, ha querido resaltar en todo momento la ayuda que se le prestó desde el club. “He de decir que los del Atlético intentaron por todos los medios que entrara”, pero se encontraron con el problema de que se le impidió.