Una de las sorpresas que llevó a cabo el Atlético de Madrid en el pasado año fue el traspaso definitivo de Joao Félix al Chelsea tras varias cesiones. El portugués, quien completó parte de la pretemporada con el equipo rojiblanco, no tenía ninguna intención de quedarse en el Metropolitano. Mostró una buena actitud en los amistosos, llegando a marcar algunos goles, pero la decisión estaba totalmente cerrada y no había vuelta atrás.
Sin embargo, su segunda etapa en Stamford Bridge no ha sido todo lo positiva que podría haber imaginado cuando aceptó regresar a Inglaterra. De hecho, tomó la decisión de abandonar la Premier League para vestir la camiseta del AC Milán, donde parece estar teniendo más protagonismo. Aún así, está muy cerca de llevarse su primer revés en el club italiano, salvo milagro la próxima semana ante el Feyenoord.
Punto de partido para Joao Félix
Los últimos seis meses del internacional portugués han sido muy complicados, más incluso que la primera vez que decidió marcharse del Atlético de Madrid. Tras no lograr convencer en sus cesiones al Chelsea y el Barça, estaba convencido de abandonar el conjunto colchonero y poder asentarse por fin en un nuevo destino. Casualidades de la vida, ese cambio de aires se produjo gracias al equipo londinense, logrando su fichaje traspasar unos 50 millones de euros.
Sin embargo, tal y como muchos pensaban, no ha sido capaz de convencer a Enzo Maresca, teniendo poco protagonismo y mostrando su mejor versión en la Conference League. En el mercado invernal volvió a salir a préstamo, en esta ocasión al AC Milán, donde parece que va a tener más minutos hasta verano. Sin embargo, esta semana cayó en el choque derrotado de ida de la eliminatoria de Champions League ante el Feyenoord (1-0), quedándose cerca del abismo de ser eliminado.
Sin éxito lejos de Simeone
Sus números están siendo muy pobres, habiendo logrado ocho goles y dos asistencias sumando todas las competiciones que ha disputado entre ambos clubes. La realidad es que Joao Félix no ha vuelto a encontrar aquella gran versión que logró en el conjunto colchonero la temporada en la que levantó el título de LaLiga. Simeone logró sacar su máximo rendimiento, además de buscar que fuese mejor jugador en todas las facetas posibles.
El Cholo siempre lo dijo, que el portugués le acabaría odiando, pero agradecería todo lo que le estaba enseñando en sus primeros años en España. Nadie sabe si está arrepentido de su decisión, pero los números dejan claro que no ha sido capaz de volver al mismo nivel que tuvo hace algunas campañas. Puede que estos meses en Italia le sirvan para volver a recuperar una parte de la humildad y empiece a crecer en base al trabajo sobre el césped.