El inicio de temporada del Atlético de Madrid ha encendido todas las alarmas. La derrota frente al Espanyol y el empate ante el Elche reflejaron un equipo plano, sin soluciones ofensivas y con serios problemas de desequilibrio en ataque. Simeone ha dejado claro que necesita refuerzos inmediatos si quiere evitar que la temporada se le complique desde el arranque.
El nombre que desvelan desde Armenie Football
En ese escenario surge el nombre de Eduard Spertsyan, centrocampista del Krasnodar y de la selección de Armenia, que según AS se ha convertido en objetivo rojiblanco. Con apenas 25 años, el futbolista está tasado en unos 25 millones de euros y tiene contrato hasta 2026, lo que complica la operación, pero no frena el interés colchonero.

El club rojiblanco necesita refuerzos, como ha quedado evidenciado. La apuesta por un fichaje de peso como Spertsyan indica que el club busca reforzar esa zona del campo con un futbolista de calidad contrastada. Alguien que sea capaz de marcar diferencias en los partidos donde más cuesta generar ocasiones.
Un jugador con calidad en los metros finales
El mediapunta armenio ha destacado en la liga rusa por su capacidad para filtrar pases, su disparo lejano y su constante movilidad. Estas virtudes lo convierten en un perfil ideal para un Atlético que necesita imaginación en tres cuartos de campo. Su llegada daría al equipo esa chispa de creatividad que tantos analistas han señalado como ausente en este arranque liguero.
Aunque el Atlético de Madrid no es el único club interesado, el movimiento de los rojiblancos parece el más firme hasta la fecha. El Southampton ya ha preguntado por el jugador, y desde Portugal también ha aparecido interés, pero ninguno con la intensidad que muestran los colchoneros. La directiva, consciente del precio elevado, estudia fórmulas para encajar la operación en un mercado que todavía puede dejar sorpresas.
Simeone, por su parte, estaría encantado con un futbolista como Spertsyan. Su estilo encaja en la idea del técnico de tener jugadores comprometidos y con sacrificio defensivo, pero que además sumen desequilibrio arriba. Si la operación se concreta, el armenio no solo reforzaría la plantilla, sino que también elevaría la competencia interna en posiciones clave, lanzando un aviso a los jóvenes que buscan consolidarse.