El Atlético de Madrid está atento a todas las jóvenes promesas que están mostrando un buen nivel en estos primeros meses de temporada. Obviamente, clubes como el rojiblanco siempre están ligados con los jugadores más importantes del continente de cara a posibles traspasos. El 2025 volverá a ser un año crucial en el Metropolitano, pues habrá que terminar esa renovación que se empezó este verano.
Algunos nombres como Gyokeres parecen casi imposibles por precio y la cantidad de competidores que hay para ficharle. Otros como Álex Baena son vistos como los perfectos sucesores de un Antoine Griezmann cuyo futuro está en el aire. Sin embargo, un jugador que gustó a Simeone en un compromiso de Champions League estaría muy cerca de marcharse a la Premier League.
Gyokeres y Álex Baena, un imposible y un sucesor
El fichaje de Julián Alvarez ha demostrado que en el mundo del fútbol todo es posible, pero repetir ese milagro parece complicado. El atacante sueco del Sporting de Lisboa es uno de los grandes goleadores del continente y su precio de salida ya estaría en los 80 millones de euros. Grandes clubes como el FC Barcelona, Manchester United o PSG ya estarían interesados en hacerse con su traspaso el próximo año.
El caso del centrocampista español es diferente, pues su cláusula de rescisión es de 60 millones de euros y hay buena relación con el Villarreal. En el Atlético de Madrid llevan años siguiendo la evolución de Álex Baena, incluso para un potencial traspaso en enero. Sin embargo, el campeón de la Eurocopa no tiene pensado salir del submarino amarillo antes de que termine el presente curso.
Muchos creen que sería la pieza perfecta para suplir a una Antoine Griezmann cuyo contrato finaliza en el 2026. La MLS sigue apretando con fuerza para ficharle lo antes posible, aunque el jugador todavía no se ha pronunciado. Evidentemente, son dos futbolistas totalmente compatibles sobre el césped, pudiendo coincidir en la plantilla en el próximo mercado.
Álvaro Carreras, adiós a Portugal
En lateral español fue uno de los mejores del Benfica en la goleada que lograron ante el conjunto colchonero en la Champions League. Ha participado en cuatro goles durante los últimos cinco encuentros, siendo una de las grandes revelaciones de Portugal. Su cláusula de rescisión es de 50 millones de euros y ya señalan al Liverpool como uno de los principales interesados.
Sin embargo, el Manchester United tiene una opción de recompra que se sitúa en los 20 millones y podría ejecutarla en invierno. La llegada de Amorim sería la razón por la que intentarían repescar a su canterano a mitad de temporada. De esta manera, aunque gustó su actuación en el Atlético de Madrid, parece que es un futbolista con un destino claro.