En las inferiores del Atlético de Madrid reside el talento, un talento que sale a flote en cuanto reciben su oportunidad con el primer equipo. Los rojiblancos cuentan con una de las mejores canteras del mundo, de la que han salido algunos de sus estandartes en la actualidad, sigan o no en el conjunto colchonero. Koke, Gabi o Fernando Torres son algunos de los ejemplos de leyendas del club que vienen desde las inferiores, escalando en su momento para ser quienes son a día de hoy.
Este fin de semana, el Atlético recibe al Sevilla en el Metropolitano, un duelo entre dos clásicos de LaLiga en el que los de Diego Pablo Simeone tienen que ganar. Los hombres del Cholo vienen en una dinámica arrolladora, en la que el equipo carbura y derrocha un fútbol de alto nivel en cada encuentro. Mañana, uno de los jugadores que más feliz hizo a la afición con su fútbol regresa a la que fue su casa y se espera que se le reciba entre aplausos.
El Atlético recibe a uno de los hombres de la casa
Y es que en el conjunto hispalense milita en la actualidad Saúl Ñíguez, leyenda del primer equipo del Atlético de Madrid durante casi una década. El ilicitano dejó auténticos momentazos con la rojiblanca, anotando goles de bandera y siendo partícipe en los años de gloria del equipo de Simeone con actuaciones que perduran hoy en día. Su zurda mágica hizo vibrar al Vicente Calderón en innumerables ocasiones, trasladando su juego y los aplausos al Metropolitano tras el cambio de estadio en el año 2017.
Sin embargo, los últimos años de Saúl en el Atlético fueron bastante complicados por su pobre rendimiento y su estado de ánimo, una desmotivación absoluta por parte de una leyenda colchonera. Las cosas no le salían y estuvo sumamente machacado anímicamente, siendo objeto de innumerables críticas durante sus últimos años en el Atlético de Madrid, una despedida lejos de la que merecía. Aun con todo, el actual jugador del Sevilla vuelve mañana al templo colchonero, donde le esperan con ansias y piensan recibirle entre aplausos cuando exclamen su nombre en las alineaciones.
Un amor incondicional
Cuando un exfutbolista regresa, ya sea en otro equipo o ya retirado, el cariño que le suele brindar la afición es ecuánime al rendimiento y las alegrías que le diera. En el caso de Saúl, muchos fueron los momentos de gloria que compartió con una hinchada que siempre le quiso por su compromiso y su amor hacia el conjunto colchonero. Dispuestos a gritar su nombre una vez más mañana, los hinchas rojiblancos esperan con ansias la llegada de su canterano, al que nunca han dejado de querer ni un minuto.