Enfado en el Atlético

Reunión clave en el Atlético de Madrid: decisión tomada sobre el mercado de fichajes

Según informó Marcos Durán, ayer, tras el entrenamiento, hubo una importante reunión en el Atlético de Madrid

El Atlético de Madrid vive días de máxima tensión. Más allá del trabajo en el césped, lo verdaderamente decisivo se está jugando en los despachos. Tras el entrenamiento de ayer, se celebró una reunión clave entre Miguel Ángel Gil Marín, Carlos Bucero y Diego Pablo Simeone. La cumbre buscaba definir los próximos pasos en un mercado de fichajes que ha generado tantas expectativas como incertidumbres.

Desde el club lo tienen clara la hoja de ruta

El mensaje oficial del club se mantiene inalterable: sin salidas no habrá llegadas. Esa postura, repetida a agentes e intermediarios, refleja la prudencia financiera de la directiva. Sin embargo, Simeone insiste en que faltan piezas para completar una plantilla que, aunque competitiva, sigue corta para afrontar todos los frentes. La tensión está servida porque el tiempo apremia y los rivales se han movido con más determinación.

Nico Gonzalez con la Juve
Nico González durante un partido | Europa Press

Uno de los temas tratados en la reunión fue el extremo derecho. Es la gran petición del técnico, que quiere un futbolista desequilibrante capaz de dar profundidad al ataque. El nombre de Nico González, actualmente en la Juventus, aparece en la lista, aunque no termina de convencer. También se habló de Take Kubo, jugador de la Real Sociedad, pero su condición de extracomunitario complica mucho cualquier operación. 

Necesidad de fondo de armario

El centro del campo fue otro punto caliente sobre la mesa. Con Cardoso, Barrios, Koke y Gallagher como piezas fijas, Simeone cree que falta un perfil específico para equilibrar al equipo. En la agenda están Marc Casadó, del Barcelona, y Mauro Arambarri, del Getafe, como opciones de última hora. Se trata de jugadores que podrían encajar en la estructura rojiblanca si surge la oportunidad adecuada antes del cierre.

La reunión también abordó la gestión de los extracomunitarios. Nahuel Molina ha sido tasado en 25 millones y Gallagher en 50, aunque no existen ofertas que se acerquen a esas cifras. Todo apunta a que ambos seguirán bajo las órdenes de Simeone, salvo un giro inesperado en la recta final del mercado. La continuidad de estas piezas es vista como necesaria, pero resta margen de maniobra en otras operaciones.