Los futbolistas del Atlético de Madrid celebran la victoria frente a su afición

La revolución en el Atlético de Madrid: un peligro necesario y un arma de doble filo

Se espera una revolución en la plantilla del Atlético de Madrid, cosa que ilusiona pero que tiene mucho peligro

Se avecina un verano turbulento en el Atlético de Madrid. Hasta siete jugadores terminan contrato este verano y previsiblemente se avecina una revolución en la plantilla. La mala temporada de los de Simeone obliga a la dirección deportiva a trabajar para poder volver a competir contra los equipos más grandes de Europa.

En el fútbol actual es muy importante contar con gente joven en las plantillas. Jugadores que físicamente estén listos para aguantar varios partidos semanales. Esto no lo cumple el Atleti, pues la edad media del equipo es una de las más altas que hay en España.

Para realizar una revolución, primero hay que dar salida a varios jugadores, sin embargo, con esto nace un debate muy típico. ¿Qué jugadores llegarán? ¿Quién nos asegura que serán mejores que los que estaban antes?

Una cuestionable gestión obliga a esto

Cuando se habla de obligación de fichar a muchos jugadores de golpe, es porque algo ha fallado en la planificación deportiva. Es importante realizar apuestas, tanto de futuro, como de presente, año tras año, porque los jugadores van cumpliendo años y el nivel va bajando. Es algo positivo traer caras nuevas, pero no hacerlo de golpe.

Imagen de los jugadores del Atlético de Madrid
El Atleti | Europa Press

Ese es el riesgo de lo que pueda pasar la temporada que viene. Un ejemplo lo tenemos con la más que posible salida de Mario Hermoso. Con sus virtudes y debilidades, ya lo conocemos y sabemos de su nivel, pero realmente no conocemos lo que nos pueden dar jugadores de fuera. 

Se habla de una revolución en la defensa, algo que es una moneda que puede salir cara o cruz. La cara, que remodelar por completo la línea defensiva sea un éxito total. La cruz, que los fichajes no den el nivel que se esperaba de ellos. 

Tema renovaciones

Con esto, no quiero decir que se deba renovar a los jugadores que terminan contrato, ni mucho menos. El cambio de ciclo en la plantilla es más que evidente y necesario, pero es algo que se debería haber hecho de manera progresiva. 

En los últimos años, han llegado más jugadores cerca de los 30 o superada esa edad que futbolistas jóvenes. Cuando haces eso, todo desemboca en lo que ha sucedido este año, una plantilla que no se sostiene físicamente. Ojalá salga bien y la revolución sea un éxito, pero como he comentado antes, es un arma de doble filo.