Dos días después de la eliminación del Atlético de Madrid en cuartos de final de la Champions League, los aficionados rojiblancos seguimos con la decepción en el cuerpo. Decepció, no por caer en cuartos, sino por hacerlo ante un equipo frágil y no mejor que tú.
Los de Simeone, pese a haber perdona grandes ocasiones, anotaron cuatro goles en la eliminatoria, suficientes para poder avanzar de ronda. Sin embargo, el bajo nivel defensivo volvió y en Dortmund los rojiblancos concedieron cuatro tantos. En una competición como la Liga de Campeones, si concedes, te vas a casa, da igual al rival al que te enfrentes.
Los nostálgicos vemos en la exhibición defensiva del Real Madrid anoche al equipo que tantas alegrías nos dio entre 2014 y 2018. La supuesta revolución que se avecina en el Atleti debe empezar por la defensa, pues los datos de este año son alarmantes.
Los peores registros
Cuando un equipo no va bien, los datos no suelen fallar y hablan por sí solos. En los últimos 11 partidos, los de Simeone han encajado 20 goles, no han dejado la portería a cero en ninguno de esos encuentros y solo han ganado cinco. Sigamos con los datos alarmantes.
En lo que va de temporada, el Atlético de Madrid ha encajado 61 goles, siendo este el mayor registro del club desde 2011. Además, debemos de contar con que aún quedan siete partidos por jugarse, por lo que esos registros se van a engordar más todavía.
Por último, en este año 2024, los rojiblancos son el equipo europeo que más goles ha encajado, solo por detrás del Luton Town, Sheffield United y Salernitana.
Los fichajes necesarios
Se habla mucho sobre la vuelta a cuatro defensas o del mal esquema de tres centrales, pero realmente lo que importa no es la formación, son los jugadores. Hermoso, Savic, Azpilicueta, Paulista y Witsel terminan contrato y todo hace indicar que mínimo dos de ellos saldrán.
Desde la dirección deportiva deben traer jugadores jóvenes, físicamente fuertes y capaces de defender el área. Porque lo primero de un defensa es defender, el trato de balón viene después. Opciones en el mercado hay y no hace falta gastar 100 millones para montar una línea defensiva competente.