Samuel Lino fue uno de los mejores jugadores del Atlético de Madrid en la pasada temporada, siendo su llegada al equipo tan novedosa como efectiva desde el inicio de su etapa. El brasileño fue casi un titular indiscutible para un Diego Pablo Simeone que estaba encantado con su joven jugador, recién llegado del fútbol carioca y madurado tras una cesión al Valencia. Lino fue artífice de épicas victorias el año pasado gracias a sus goles, asistencias y jugadas explosivas por el costado izquierdo, del que se adueñó con su juego y su desborde.
Sin embargo, este Lino no es el mismo que hiciera las delicias del respetable colchonero el año pasado, siendo la 24/25 una temporada muy floja del extremo sudamericano. Lino aún no ha estrenado su contador esta temporada y apenas tiene minutos de juego, dado el cambio de sistema y la intrascendencia del '12' cada vez que sale de inicio. Por ello, tanto Simeone como el club ya le buscan un recambio de garantías y de un perfil parecido y que rinda como solía hacerlo Lino en la pasada temporada.
Un sustituto a la altura del jugador
El brasileño dejó una huella importante en la 24/25 con su juego alegre y su determinación a la hora de encarar y definir, especialmente teniendo en cuenta su novedosa llegada. Lino causó tal impacto en el equipo que gran parte de la afición le eligió como el mejor jugador de la temporada por encima de estandartes del club como Antoine Griezmann. Sin embargo, este año el banquillo y las segundas partes parecen haberse adueñado del fútbol de un Samu Lino que confía en poder revertir su situación y recuperar su mejor nivel.
Aun con todo, el Atlético ya ha indagado en varios jugadores que puedan suplirle, rivalizando con el Villarreal por su fichaje procedente desde el fútbol inglés, donde está destacando bastante. Borja Sanz parece haber sido el elegido por colchoneros y groguets para reforzar sus costados, gracias al gran desempeño del español en el Norwich City en este arranque de temporada. Aun con todo, el Atlético no tiene en mente pagar los 25 millones exigidos desde Inglaterra, donde el jugador está tasado en apenas 2,2 millones, por lo que Lino debe espabilar.
A tiempo de redimirse
Lino no ha dicho, ni mucho menos, su última palabra este año, incluso a pesar de toda la presión y las críticas que anda recibiendo por su pobre desempeño esta temporada. Lino sabe que ha de mejorar su fútbol, más bien pulirlo hasta el punto de ser ese jugador desequilibrante e impredecible de nuevo para poder darle muchas alegrías a los rojiblancos. Dispuesto a redimirse y volver a encauzar su juego, Samu Lino trabajará para volver a ganarse la confianza de Simeone tras el presente parón internacional de estas semanas.