Diego Pablo Simeone lo ha vuelto a hacer. En un partido agónico en el Sánchez Pizjuán, el Atlético de Madrid consiguió una victoria crucial por 1-2 frente al Sevilla, gracias a un golazo de Pablo Barrios en el descuento. Un triunfo que no solo sirve para sumar tres puntos vitales, sino también para lanzar un mensaje directo y potente a Real Madrid y FC Barcelona: “Vamos a seguir insistiendo”.
Atlético de Madrid: una victoria que va más allá de los puntos
En la rueda de prensa posterior al partido, Simeone dejó claro que este triunfo tiene un valor emocional y competitivo muy importante. “Este gol nos hace confirmar que el trabajo que estamos haciendo es bueno. Los chicos siguen insistiendo y siguen yendo a buscarlo”, señaló con orgullo.
Y no era para menos. El Atlético venía de semanas durísimas, con eliminaciones en Champions League y Copa del Rey, y un calendario post parón que incluía al Espanyol, al Barcelona y ahora al Sevilla. Tras dejar escapar puntos ante los primeros y caer frente a los culés, esta victoria era urgente. Y se consiguió como manda la historia rojiblanca: con sufrimiento, carácter y fe hasta el último segundo.
Simeone lanza su amenaza: “Vamos a seguir insistiendo”
Aunque el título liguero parece lejano, Simeone no se rinde. En una de las frases más potentes de la noche, el argentino lanzó una clara advertencia al Real Madrid y al FC Barcelona: “¿Que va a costar? Claro. ¿Que nos la vamos a pegar? Claro. Pero vamos a seguir insistiendo”.
Un mensaje cargado de determinación, muy al estilo del Cholo, que demuestra que este Atlético no está dispuesto a bajar los brazos. Aunque el liderato esté a varios puntos de distancia, el equipo buscará sumar los máximos puntos y esperar a que los de arriba pinchen.
Pablo Barrios y la fuerza del grupo
El gol de la victoria fue obra de Pablo Barrios, un joven que ha sido arropado por el cuerpo técnico y que, como destacó Simeone, venía trabajando en silencio. “Siempre estamos detrás de él. Nos dio una gran alegría por no dejar de insistir”.
El técnico también quiso subrayar la implicación de todo el vestuario. Destacó la labor de jugadores como Riquelme, Lemar y Witsel, que pese a no contar con muchos minutos, han sabido esperar su momento. “Sé que tengo un grupo que siempre espera su momento. Necesitamos gente que entienda esto”, dijo el entrenador colchonero.