Lo más habitual en el panorama futbolístico es que la expectación de los aficionados se centre en los posibles fichajes que lleguen a sus equipos. Es algo que, evidentemente, también sucede en el seno del Atlético de Madrid, donde ya se trabaja de cara a la próxima temporada y al mercado de verano. Será un momento decisivo, pues las expectativas en el Metropolitano se sitúan en poder tener una de las plantillas más competitivas de Europa.
Sin embargo, a esa hoja de ruta le afecta directamente el apartado de las salidas, pues varios jugadores no tienen asegurada su continuidad. Figuras como César Azpilicueta o Axel Witsel abandonarán la plantilla este mismo año tras acabar contrato y no renovar con el club. Todas esas bajas necesitarán ser solventadas con refuerzos, aunque el conjunto colchonero va a tener mucho trabajo por delante.
Una defensa con muchas urgencias
Sin duda, una mejora con respecto a la pasada temporada ha sido la parcela defensiva, donde el Atlético de Madrid ha logrado encontrar la solvencia. Jan Oblak se mantiene como el líder en la clasificación en el Trofeo Zamora, lo que le otorgaría su sexto galardón como el guardameta menos goleado de LaLiga. Para lograrlo, han sido claves las llegadas de Robin Le Normand y Clement Lenglet, quienes han dado un gran nivel bajo las órdenes de Simeone.
Sin embargo, en el Metropolitano quieren ir más allá y buscarán nuevos centrales que sigan dándole más seguridad al equipo. Salvo sorpresa, tanto César Azpilicueta como Axel Witsel pondrán fin a sus respectivas etapas como colchoneros y dejarán dos huecos en la plantilla. Ya han sonado numerosas opciones para llegar al conjunto colchonero para la siguiente campaña, pero hay una en España que se está ganando muchos elogios por parte de los hinchas.
Regreso ilusionante al Atlético
Algo importante a destacar es que el Atlético de Madrid va a tener que realizar grandes desembolsos en el próximo mercado para poder cumplir con todas sus necesidades. Por ello, no es raro que puedan activar la opción de recompra con la que cuentan por Santiago Mouriño, quien fue traspasado al Deportivo Alavés. El defensor uruguayo está siendo una de las pocas noticias positivas del equipo vasco, mostrando su mejor versión en los últimos meses.
Es una pieza muy polivalente, pues durante su etapa a préstamo en el Real Zaragoza también comenzó a desarrollarse como lateral diestro, aunque no es su posición ideal. Por otro lado, el cuadro de Vitoria está inmerso en una ajustada pelea para evitar el descenso, siendo el club que actualmente marca la permanencia. A sus 23 años, Mouriño sería una opción asequible para rejuvenecer la plantilla y poder enfocar todos los esfuerzos en cerrar otras operaciones.