Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, ha encendido la ilusión entre los colchoneros con sus declaraciones sobre la Champions League. Durante su participación en 'Babylon Show', junto a Marcos Llorente y Koke, Cerezo dejó claro que la Champions sigue siendo su gran asignatura pendiente. Sus palabras resonaron no solo en el programa, sino también en el vestuario del Atleti.
Cerezo, visiblemente emocionado, confesó que espera con ansias el inicio de la Champions. Es una competición que ha estado cerca de ganar en dos ocasiones, pero que se le ha escapado en finales contra el Real Madrid. "Ahora empieza la Champions, nuestra asignatura pendiente y a la cuarta será la vencida", afirmó Cerezo con determinación. Este comentario refleja su deseo personal y el de toda una afición que ha sufrido esas derrotas ante su eterno rival.
La necesidad de Enrique Cerezo
Marta Torné le preguntó a Cerezo si se pondría nervioso ante la posibilidad de enfrentar de nuevo al Real Madrid en una final. Cerezo no dudó en su respuesta: "No es que me ponga más nervioso, es que la necesitamos". Sus palabras muestran su ambición y una necesidad casi obsesiva por ganar la orejona, el trofeo que se le ha resistido al club rojiblanco.
Cerezo también habló sobre el nuevo formato de la Champions, subrayando la importancia de clasificarse para los octavos de final como objetivo mínimo. "Tenemos una exigencia de intentar meternos en ese grupo de octavos. Es un formato nuevo, con muchos partidos y equipos, unos en casa y otros fuera. Es un formato para intentar ganar el máximo número de partidos posible para clasificarse".
El mayor deseo del club
Las declaraciones de Enrique Cerezo reflejan su deseo de éxito en Europa y la presión sobre el equipo para rendir al máximo en la competición. La Champions es una espina clavada para el presidente y una deuda pendiente para el Atlético de Madrid, que busca finalmente conquistar el título que tanto anhela.
El mensaje ha calado en el vestuario del Atlético, donde jugadores y cuerpo técnico saben que la expectativa es alta. Simeone y sus jugadores entienden que la presión es parte del ADN del club. La Champions no es solo un objetivo, sino una necesidad para un equipo que ha rozado la gloria europea, pero que aún no ha podido alcanzarla.