El Atlético de Madrid ha comenzado la temporada con señales positivas en todas sus líneas. El equipo de Simeone mostró solidez en su visita al RCD Espanyol, dejando claro que la defensa será uno de los pilares del proyecto. El técnico argentino celebró el rendimiento de su zaga, que se mostró firme, ordenada y con personalidad.
La afición rojiblanca pedía un refuerzo que pudiera marcar diferencias en la retaguardia. Tras años de altibajos defensivos, el club ha apostado por recuperar ese muro que tantas alegrías dio en el pasado. El objetivo es claro: volver a ser un equipo difícil de batir, con una defensa que imponga respeto desde el primer minuto.

El partido ante el Espanyol sirvió como termómetro, el Atlético no solo mantuvo el orden, sino que también mostró capacidad para salir jugando desde atrás. La presión alta del rival no fue suficiente para desestabilizar a una defensa que empieza a consolidarse. Y en ese bloque, hay un nombre que empieza a destacar por encima del resto, David Hancko.
La roca que ilusiona
El central eslovaco debutó como titular y lo hizo con nota alta, fue uno de los mejores del encuentro. Desde el primer minuto mostró personalidad, agresividad y liderazgo. Tuvo la primera gran ocasión del partido tras un centro lateral de Baena, y estuvo cerca de abrir el marcador con un potente cabezazo.
David Hancko es un defensor técnico, con buen juego aéreo y capacidad para proyectarse al ataque, su presencia en el campo da seguridad al resto de la zaga. Robín Le Normand, su compañero en la línea defensiva, se mostró más cómodo y preciso con el balón en los pies. La dupla promete ser una de las más sólidas de LaLiga.
El Atlético construye su fortaleza desde la defensa
El Atlético ha hecho una apuesta firme por Hancko, su fichaje responde a una necesidad clara: reforzar la defensa con un jugador de garantías, algo celebrado por Simeone. El técnico ve en él a un líder natural, capaz de ordenar, corregir y marcar el ritmo desde atrás. Su adaptación ha sido rápida y efectiva.
La filosofía de Simeone siempre ha girado en torno a la solidez defensiva, con Hancko, el equipo recupera esa esencia, el eslovaco encaja perfectamente en el estilo del técnico argentino. Es intenso, disciplinado y tiene carácter. Además, aporta salida limpia de balón y presencia en jugadas a balón parado.
La afición está ilusionada, Hancko ha caído de pie en el Metropolitano, su rendimiento ante el Espanyol ha generado expectativas. Muchos ya lo ven como el nuevo líder de la defensa rojiblanca, un jugador que puede marcar diferencias y devolver al Atlético su identidad defensiva. La ilusión eslovaca llega al Metropolitano y Simeone lo celebra.