Partido trascendental el que afrontará mañana en Cádiz el Atlético de Madrid con el objetivo de mantenerse en los puestos de Champions League. La temporada a domicilio del equipo colchonero no está a la altura de un club que quiere luchar por títulos. Por ello, los muchachos Simeone deberán salir con intensidad en busca de una victoria más importante de lo que puede parecer.
De hecho, existen algunos fantasmas en esta visita del Atlético al Cádiz, especialmente tras lo ocurrido la temporada pasada. Fue allí donde el equipo rojiblanco tocó fondo en una de las temporadas más difíciles con Simeone en el banquillo. Por ello, para evitar sorpresas, los rojiblancos deberán saltar al campo con el convencimiento de llevarse los tres puntos y evitar un nuevo tropiezo.
Un estadio de mal recuerdo
Seguramente, la temporada pasada es una de las más complicadas desde que Simeone llegó al Atlético en el año 2011. El equipo rojiblanco no terminaba de arrancar en ninguna de las competiciones, quedándose muy pronto sin luchar por títulos con varios meses por delante. La visita al Cádiz fue uno de los momentos más bajos del curso pasado, con una derrota más que dura de digerir.
En aquel momento, el Atlético se encontraba envuelto en un conflicto interno entre Simeone y João Félix. La relación entre ambos ocupaba gran parte de la información del conjunto colchonero, creando un ambiente muy tóxico en las gradas del Metropolitano. El partido en Cádiz supuso un nuevo obstáculo en la temporada, con una derrota que fue muy dura para el equipo y los aficionados.
El Cádiz se puso 2-0, pero sería el propio João Félix quien, desde el banquillo, empataría el encuentro en los últimos minutos. Sin embargo, cuando el reparto de puntos parecía inevitable para ambos, el Cádiz marcó el tanto de la victoria en el minuto 99. De hecho, la única noticia positiva de qué el encuentro fueron los buenos minutos que Pablo Barrios disputaba con el primer equipo.
Simeone no quiere más problemas
Mañana, el Atletico regresará a ese mismo escenario con una situación muy diferente a la que se vivía la anterior campaña. Cierto es que el rendimiento del equipo como visitante está muy lejos de lo que se podría esperar a comienzos de este curso. Sin embargo, los rojiblancos quieren evitar más tropiezos fuera de casa y mantenerse en puestos de acceso a la Champions League.
El Cádiz ha mostrado muchos problemas esta temporada, manteniéndose impuestos al descenso y sin conocer la victoria desde hace meses. Aún así, el choque de mañana no supone una final para el conjunto andaluz, el cual tiene mucho que ganar y poco que perder. Sin embargo, los colchoneros no pueden permitirse otro tropiezo a domicilio y seguir dando más aire a sus perseguidores.