Marcador del partido entre el Borussia y el Atlético

Debacle histórica en Dortmund: el Atlético de Madrid, eliminado

El equipo español no pudo parar el huracán alemán, que se impuso 4-2 en la vuelta de los cuartos de final

No duró muchos días la alegría en el club rojiblanco, que llegaba al choque tras imponerse en la ida, y después de una gran victoria frente al Girona. El 16 de abril de 2024 era una fecha marcada por todos los aficionados, y la decepción  tras la eliminación, es total. El Borussia Dortmund cuajó un gran partido, y fue capaz de noquear a los de Simeone con dos goles prácticamente seguidos. 

Asedio en la primera mitad

Los alemanes comenzaron el partido como se esperaba, con una marcha más y mirando siempre hacia la portería contraria. Ya en la primera jugada Sabitzer controlaría un centro raso, y justo antes de marcar a placer llegaría Azpilicueta para salvar el primero. Dos minutos después, Griezmann consiguió peinar un despeje para dejar a Morata mano a mano con el portero, y como de costumbre no estuvo acertado, su vaselina se marchó desviada.

Pasaban los minutos y parecía que el Atlético de Madrid conseguía frenar  el asedio alemán, que comparado con eliminatorias como la de Anfield o Allianz Arena estaba siendo tibio. Pasaba el minuto 34 cuando Hummels filtró un pase con el exterior, controló Brandt  y con solo dos toques consiguió el espacio suficiente para disparar raso y batir a Jan Oblak.

Maatsen celebrando el segundo gol alemán
Maatsen celebrando el segundo gol alemán | X: @BVB

El Atlético de Madrid no consiguió reponerse del duro golpe, la moral estaba por los suelos. Tan solo cuatro minutos después el equipo alemán volvió a irrumpir por el costado de Witsel y Nahuel Molina, donde estaba sucediendo todo el peligro. Una gran combinación entre Maatsen  y Sabitzer dejaba al primero solo, y cruzó el cuero de la misma manera que Brandt, acabando all fondo de las mallas.

La última gota de esperanza

El equipo colchonero terminó la primera parte con serios síntomas de estar noqueado, y Simeone  decidió hacer tres cambios. Entraron Ángel Correa, Rodrigo Riquelme y Pablo Barrios, y se marcharon Álvaro Morata, Nahuel MolinaCésar Azpilicueta. Los cambios surtieron efecto y el equipo salió muy enchufado  en la segunda parte.

Nada más empezar el segundo tiempo, Antoine Griezmann votó un córner que parecía algo pasado, y Mario Hermoso remató para que Mats Hummels despejara al fondo de la portería. En tan solo cuatro minutos volvieron a empatar  la eliminatoria, y el equipo y la afición recuperaron la energía. Las fuerzas estaban igualadas y un nuevo encuentro parecía disputarse.

En el minuto 64 se produjo lo que parecía un golpe definitivo a la eliminatoria. Un gran pase de Griezmann dejaba a Correa caracoleando en el área, y tras dos movimientos sacó un centro al segundo palo. Allí llegó el remate de Riquelme, repelido por Kobel, el rechace  lo recogió Correa  que disparó contra la defensa, y en el segundo rechace reventó el balón contra el larguero, con la  suerte de que el balón entró en la portería.

Los fantasmas del pasado

El Atlético lo tenía prácticamente hecho, de estar fuera pasó a volver a ponerse por delante en la eliminatoria. Pero esta vez el destino no quiso que los rojiblancos jugaran las semifinales la próxima semana. En el minuto 71, un gran centro de Sabitzer desde el lado izquierdo, otra vez, fue rematado por Füllkrug en un disparo imposible para Jan Oblak.

Ya con el equipo derribado, aunque solo habían empatado la eliminatoria, los alemanes aprovecharon la siguiente jugada para ponerse por delante en la eliminatoria. Tan solo tres minutos después, Marcel Sabitzer  que estaba cuajando un gran partido, recogió un rechace en la frontal y cruzó el esférico alejándolo de la estirada del portero esloveno. El gol automáticamente dejó al Atlético de Madrid sin ningún tipo de opciones.

Tras el gol el equipo quedó anonadado, no conseguían llegar a la portería alemana. El Cholo miraba al banquillo y no encontraba soluciones, no tenía jugadores de ataque disponibles, algo que se debería poder permitir un equipo que lucha por estar en semifinales de Champions. Sacó a un Saúl que no pudo hacer nada, el equipo estaba totalmente destruido.

El colegiado pitó el final del partido sin tener ninguna llegada clara del conjunto colchonero tras el último gol. Los últimos minutos fueron muy dolorosos de ver, con un equipo sin fuerzas para poder buscar una posible prórroga. Tendrá que ser otro año, pero lo que es seguro es que el Atlético de Madrid, volverá.