Los parones de selecciones son vistos por los clubes con mucho temor. Los jugadores añaden más carga de partidos a sus piernas y como vemos se producen muchas lesiones.
Sin ir más lejos, durante esta última ventana hemos podido ver como Gavi, Vinicius o Camavinga caían lesionados de gravedad.
Desde el Atlético de Madrid tocaban madera, ya que sus internacionales llegaban a la última jornada de este parón sin lesionados y solo quedaba Francia.
Griezmann no conoce lo que es rotar
La selección francesa llegaba a la última jornada de la clasificación a la Eurocopa como líder matemática. Todo victorias y un último partido ante la selección griega totalmente intrascendente.
Después de disputar los 90 minutos en el encuentro ante Gibraltar que acabó 14-0, todo hacía indicar que Didier Deschamps rotaría, pero no ha sido el caso.
Antoine Griezmann partió como capitán el partido contra Grecia y volvió a jugar los 90 minutos, cosa que indigna a la afición colchonera. El principito volvió a hacer un grandísimo partido, siendo el timón de la selección francesa, tomando siempre las decisiones adecuadas y realizando un gran esfuerzo defensivo.
Sin embargo, el otro capitán del equipo, Mbappé, sí que pudo descansar y jugó tan solo 27 minutos, en los que dio la asistencia del 2-2 final.
Después del partido, Antoine se mostró bastante enfadado con la UEFA por el gol fantasma no concedido en el último minuto: "Tienen mucho dinero, pero no hay para la línea de gol. Si quieren que juguemos más partidos, que pongan más tecnología".
El hombre de acero
Todos conocemos el nivel actual de Antoine Griezmann. El jugador del Atlético de Madrid es sin duda uno de los mejores futbolistas del mundo y posiblemente está al mejor nivel de su carrera.
Pero no es solo su nivel lo destacable. El principito no tiene descanso ni en su club ni en la selección y por el momento se muestra excelso físicamente.
Antoine ha sido el titular en todos los partidos esta temporada y ha jugado el 91% de los minutos. Además, ostenta el récord de encuentros disputados de manera seguida con la selección francesa con 84.
Clave para el Atleti y para su selección, al francés debería ser obligatorio darle descanso cuando se jueguen partidos irrelevantes o estén ya decididos.
Porque aunque no sea propenso a lesionarse, los futbolistas son humanos y cuando fuerzas mucho la máquina, finalmente se termina rompiendo.