Morata centrando con el exterior en el España-Brasil

Discreto partido de Álvaro Morata ante Brasil: vergüenza y pitos en el Bernabéu

El jugador madrileño fue parte del once inicial elegido por Luis de La Fuente para el amistoso contra la selección sudamericana, pero su actuación no fue destacable

El capitán  de la selección española afrontaba un nuevo partido con ganas de resarcirse  tras no marcar en el amistoso contra Colombia. Luis de la Fuente decidió que tenía que formar en punta de ataque junto a Nico Williams y Lamine Yamal. Partido muy destacado  por parte de ambos extremos y de Rodri, con un doblete  desde la pena máxima.

Hay polémica  servida tras escuchar pitos  a Morata  de parte de la afición que asistió al Bernabeu. En cambio los brasileños  del Madrid salieron ovacionados  de su estadio. Tanto los jugadores  como el entrenador  acabaron hartos  del comportamiento de las actitudes de 'La Canarinha'.

Dominio español en la primera parte

El partido comenzó con una sorpresa  muy emocionante, no sería Álvaro Morata el portador del brazalete de capitán, sino que sería Rodri. El abuelo  del ex del Atlético falleció  durante esta semana, y su excompañero decidió cederle  el brazalete en un día muy importante para él. 

España  buscó presionar  a Brasil  para tratar de forzar errores en la salida de balón de los sudamericanos. Estos no conseguían frenar  las embestidas de "La Roja", que encontraba con frecuencia tanto a Nico Williams  como a Lamine Yamal. Cada vez que el segundo tocaba el balón, la defensa brasileña temblaba.

En el minuto 12, una jugada espectacular  de Lamine  que se marchó de tres rivales con pequeños recortes dentro del área, terminó en penalti. Rodri  fue el encargado de transformarlo, y emocionado señaló al cielo para dedicárselo  a su abuelo. No ha sido una semana difícil  para el jugador del City, que se ha ausentado  de algún entrenamiento, pero ha realizado un magnífico  partido.

Rodri emocionado tras marcar un gol
Rodri emocionado tras marcar el primer penalti | X: @SEFutbol

Seguía la selección española dominando, y llegaría otra jugada personal maravillosa. Dani Olmo amagaba y hacía un caño  precioso a Beraldo, al que añadía un recorte  para dejar roto a Guimaraes. Puso el balón al fondo  de la red con una buena definición y el 2-0 en el marcador.

Antes de llegar al descanso, el partidazo de la selección se manchó  por un error gravísimo  de Unai Simón. Sacando el balón jugado como de costumbre, cedió  un balón botando en la frontal, y  Rodrygo Goes definió a la perfección  con una vaselina  por encima de este. 

Debut de Endrick en el Bernabeu

Comenzó la segunda parte, y el futuro jugador del Real Madrid debutó  en su estadio. A los cinco minutos, el brasileño recogió un rechace  en la frontal, y puso las tablas  en el marcador. A partir de este momento, el juego de España empeoró  considerablemente y Brasil comenzó a tener más ocasiones.

Álvaro Morata bajaba a recibir de espaldas, algo que le vemos hacer también en el Atlético de Madrid. No terminaba de tener precisión  ni de cara a puerta, ni en el último pase y fue sustituido  en el 81'. El Santiago Bernanéu despidió con pitos al capitán de su selección, algo que avergonzó a  Luis de la Fuente en la sala de prensa.

En los minutos finales una caída  de Carvajal en el área provocó otro penalti  a favor de España. Ambos penaltis fueron muy rigurosos, pero al no haber VAR el colegiado no pudo revisarlos. Este fue transformado  por Rodri, que volvió a dedicárselo a su abuelo fallecido. 

Parecía que la victoria se quedaría en territorio español, pero en el minuto 95Carvajal  cometió falta  sobre Galeno, y Brasil tenía la oportunidad de empatar desde los 11 metros. Paquetá  no falló y volvió a poner las tablas  en el marcador. El partido terminó 3-3, y la tensión  entre los dos banquillos creció  tras el pitido final.

Las sensaciones de 'La Roja' fueron muy positivas  en la primera parte. Se vio un equipo sólido y candidato  para la próxima Eurocopa. No obstante, este amistoso contra el racismo no fue un partido limpio, los brasileños formaban tanganas  y buscaban  a los jugadores españoles constantemente.

Más que un partido amistoso por una buena causa, pareció un partido con la tensión  de un Mundial. La imagen  dada al mundo no fue positiva, y el racismo  pasó a una segundo plano. Habrá que ver si incluyen las imágenes de Vinicius provocando y bucando a los jugadores españoles en su próximo documental.