Ayer el jugador del partido se lo llevó Nahuel Molina, pero perfectamente se lo podía haber llevado Jan Oblak. Hasta ocho paradas completó el portero esloveno que sostuvo al equipo cuando más lo necesitaba. El asedio del PSG recordó a otros vividos con la camiseta del Atlético de Madrid y con idéntico resultado.
Si fue determinante en su área, también puso de su parte para que también lo fuera en la contraria. Suyo fue el pase que produjo el contrataque de la mano de Antoine Griezmann y que, finalmente, desembocó en el gol de la victoria de Ángel Correa en el 93'. Aún así, el guardameta colchonero se quita méritos y ensalza el valor del equipo.
"Hay diez jugadores delante de mí"
"La presión casi no la notas, lo que quieres es intentar parar todo. Hay diez jugadores delante que siempre me ayudan lo máximo que pueden y eso es un equipo, nunca estoy solo". Como siempre, Jan Oblak con esa calma que le caracteriza y siendo muy reflexivo en sus declaraciones.
"El fútbol a veces es raro, el partido del Lille merecimos ganar por las ocasiones generadas y hoy no tanto. A veces ganas partidos que parece que no vas a ganar y pierdes partidos que parece que no vas a perder. Esto es lo bonito del fútbol."
"El Atlético nos marcó un gol en un estornudo"
Estas fueron las llamativas declaraciones de Luis Enrique al acabar el partido en sala de prensa cuando era preguntado por la falta de contundencia. Antonio Ruiz, periodista de Cadena COPE, le preguntó por estas declaraciones y su opinión al respecto. Dentro de lo recatado que es siempre, le dejó unas declaraciones que pueden ser interpretadas por muchos como un 'palito'.
"Le entiendo perfectamente, era un partido en el que nos llegaron mucho y lo pierden en el último segundo. Al final es difícil de asimilar y aceptar cuando ocurren estas cosas, esta victoria es fruto de nuestro trabajo como equipo y del esfuerzo de todos los compañeros".