El encuentro arrancó de lo más vibrante, con un Barcelona con ganas de adelantarse cuanto antes en el marcador. De hecho, Raphinha, con un disparo cruzado, se quedó cerca, pero su lanzamiento se fue fuera de la meta defendida por Oblak. Poco a poco, el Atlético se fue tranquilizando y teniendo un mayor control del cuero en los primeros compases.
El choque empezó a convertirse en un pequeño correcalles desde los primeros compases, con un cuadro azulgrana que quería asediar a Oblak. Mientras, los de Simeone, que no querían perder el ritmo, también buscaban avanzar de forma decidida hacia la portería contraria. Los colchoneros no querían ser intimidados, y eso pasaba por salir de su propio campo desde los primeros minutos.
Un Barcelona arrollador domina al Atlético en los primeros compases
Sin embargo, era el FC Barcelona el que tenía las ocasiones más claras, siendo Lewandowski el receptor de dichas aproximaciones. El delantero polaco se ha quedado varias veces de anotar un tanto ante el Atlético de Madrid. En una de ellas, empalando el balón, el ex del Bayern estuvo muy cerca de poder inaugurar el marcador en Montjuic.
El cuadro de Xavi intentaba mover el campo, buscando acorralar a un Atlético de Madrid paciente, que buscaba salir a la contra. El plan de partido estaba claro para los dos conjuntos, que no querían perder la paciencia para poder adelantarse en el electrónico.
Joao Félix estrena el marcador… y lo celebra
Pocos minutos antes de llegar a la primera media hora del encuentro, llegó el primer tanto del FC Barcelona. El cuadro azulgrana, en un vertiginoso contraataque, se aprovechó de la fragilidad defensiva de los de Simeone. En este momento, es cuando entró en escena Joao Félix, uno de los protagonistas en la previa del encuentro.
El delantero portugués, todavía futbolista del Atlético de Madrid, picó el balón y Oblak no pudo detener el disparo del luso. Por supuesto, Joao Félix celebró el gol ante los de Simeone, desquitándose tras su etapa en la capital. Con los puños cerrados y sobre una valla, el ‘14’ desató su euforia junto a los aficionados azulgranas.
Un flojo Atlético no revierte la situación en la primera parte
El Atlético de Madrid debía dar un enorme paso adelante para no perder un solo punto en este partido. El cuadro rojiblanco empezó a generar ciertos acercamientos hacia la meta de Iñaki Peña, con el objetivo de incomodar al guardameta culé. De forma gradual, los de Simeone buscaron acercarse hacia el área de los azulgranas, que no debían bajar el ritmo en el encuentro.
Sin embargo, la tendencia no cambiaba y era el Barça el que tenía el control del partido en todo momento. El Atlético estaba desbordado y no podía contener las aproximaciones que estaba teniendo el cuadro de la Ciudad Condal.
Un Atlético algo mejorado sigue sufriendo ante un gran Barça
Simeone no quiso perder tiempo, y ya, en el descanso, tomó medidas para impedir que se produjese lo que pasó en los primeros 45 minutos. El técnico argentino realizó un triple cambio con el objetivo de dar dinamismo a los suyos, que necesitaban dar un claro paso adelante. Sin embargo, el FC Barcelona no estaba por la labor de ceder ni un solo milímetro a los colchoneros en Montjuic.
Mientras tanto, el Atlético intentaba acercarse poco a poco al área defendido por Iñaki Peña. Morata tuvo una buena ocasión, obligando al guardameta a intervenir, pero el colegiado señaló fuera de juego de los rojiblancos. En todo caso, la intensidad de los de Simeone era notablemente mayor que en la primera mitad.
Enfrente, estaba un FC Barcelona que luchaba por embotellar a los jugadores capitalinos en el inicio del segundo tiempo. Los azulgranas, que no bajaban el ritmo, no querían dejar salir a los rojiblancos de su propio área. Tenían un plan de encuentro los de Xavi, y les estaba saliendo a la perfección, para satisfacción de su técnico.
El Atlético empieza a despertar y empieza a llegar al área culé
A pesar de que el Atlético quería mejorar, el FC Barcelona estaba arrollando y aprovechándose de los malos pases que realizaba el cuadro madrileño. De hecho, Raphinha, tras una eléctrica jugada individual, tuvo el 2-0. A pesar de su esfuerzo, el paló lamió su lanzamiento, que terminó quedándose en nada.
Eso sí, el cuadro de la capital de España quiso responder, y Griezmann tuvo la mejor ocasión del partido para el Atlético. El francés, alcanzando el área contraria, estrellaba el balón en el lateral de la red. Ante un gran FC Barcelona, el cuadro de Simeone lo tenía muy complicado para poder crecer durante el encuentro.
Posteriormente, Álvaro Morata tuvo otra gran ocasión para intentar igualar la contienda. Tras un buen centro lateral, el delantero madrileño se quedó muy cerca de sorprender a Iñaki Peña, pero, desafortunadamente, su disparo se terminó saliendo. Estos dos avisos ponían en guardia al equipo local, que no debía despistarse.
El Atlético, incapaz de poner en apuros a Iñaki Peña
El partido se mantenía en la misma dinámica, pero, en esta fase, el Barça quería contemporizar todo lo posible. Con el paso de los minutos, el cuadro azulgrana quería mantener el balón todo el tiempo posible. Eso no impedía, sin embargo, que el Atlético de Madrid pudiera seguir acercándose a la portería de Peña.
En el último tramo del encuentro, el cuadro rojiblanco necesitaba poder dar un claro paso adelante para incomodar a su rival. Sin embargo, la superioridad de los de Xavi era evidente, mostrando un gran nivel en todas las facetas del juego. Así, el Atlético estaba desactivado, por mucho que le pusiera voluntad, una de las grandes mejoras de la segunda mitad.
El Atlético quiere pero no puede igualar el partido
A pesar de esto, el Atlético de Madrid no se rendía, y, de hecho, se quedó muy cerca del empate. Memphis, de falta directa, estuvo a punto de igualar el encuentro, pero Iñaki Peña, con una gran parada detuvo su lanzamiento. Más con fe que con cabeza, el cuadro de la capital de España no dejaba de intentar poder dar la vuelta a la situación.
En los últimos minutos del partido, el Atlético al fin consiguió poder incomodar al FC Barcelona, que estaba acusando el desgaste acumulado. Aún así, el cuadro de la Ciudad Condal seguía teniendo buenos acercamientos para sentenciar el encuentro. Lewandowski, con un buen remate, se quedó muy cerca del 2-0, pero su disparo se fue desviado.
Con la inercia de todo lo conseguido durante el encuentro, el FC Barcelona fue capaz de aguantar las acometidas rojiblancas. El cuadro entrenado por Xavi mostró una gran madurez y pudo resistirse a los acercamientos de los de Simeone. Por su parte, el Atlético, a pesar de que quiso, no pudo y se dejó tres puntos fundamentales en la lucha por la Liga.