El Atlético de Madrid no borra de su lista la necesidad de fichar un pivote para la próxima temporada. Es la asignatura pendiente que tiene Andrea Berta y Miguel Ángel Gil con Simeone después de que estos no le trajeran al argentino al "5" que tanto deseaba en verano. Un problema que, además de haberse visto reflejado en la presente campaña, deberá de solucionarse de cara al año que viene.
En este aspecto, múltiples jugadores han salido a la palestra, aunque no será hasta verano que el Atleti se pondrá manos a la obra seriamente. No obstante, el último nombre que ha sonado para reforzar el centro del campo rojiblanco ha sido el de Alan Varela, del Oporto. El futbolista argentino de 22 años está generando furor en Portugal por su gran temporada con los dragones.
Tanto es así que, aunque su valor de mercado sea de 25mill€ según transfermarkt, la cláusula de rescisión llega a los 70 millones de euros, una cifra inalcanzable para el Atleti. Un crecimiento exponencial, pues hace apenas un año, Valera militaba en Boca Juniors y su valor no llegaba a 10 millones de euros, de hecho llegó al Porto por ocho.
Esto confirma que el crecimiento del jugador no es algo falso, si no que está haciéndose un hueco muy importante en la élite del fútbol europeo como centrocampista. Es por eso que el equipo de Simeone no ha sido el único en fijarse en el jugador. Es aquí donde entra otro de los factores que complicaría su fichaje, pues los grandes de Inglaterra y el Bayern de Múnich también siguen de cerca al argentino.
Un perfil caro, pero necesario
La llegada de un cinco para la plantilla de Simeone se presenta como algo obligatorio. El Atleti estuvo detrás de Højbjerg durante todo el verano pasado, pero las exigencias económicas del Tottenham impidieron su traspaso. Algo que se alargó tanto, que Andrea Berta no encontró un plan B de última hora para reforzar el equipo.
Esto obligó a Simeone tener que buscar su propio comodín, encontrando en Koke un parche a medio plazo. No obstante, es evidente que, aunque Koke sostiene muy bien al equipo desde esa posición, no es el lugar donde el capitán del Atlético de Madrid pueda dar su mejor versión. Algo parecido sucedió con Barrios cuando este tuvo que sustituir a Koke a principio de temporada.
Simeone se inventó un 5 que nadie esperaba, pero que no terminó rindiendo a un gran nivel. Tampoco pasó con Vermeeren, quien llegaba como el "5" tan solicitado por el argentino, pero no está teniendo apenas participación con el equipo. Inventos que, a corto/medio plazo sirven, pero a largo plazo se debe buscar una solución.
Esto será, por tanto, junto a la defensa, el tema principal que deberá solucionar la directiva del Atlético de Madrid. Es por ello que el próximo verano se presenta como una carrera contrarreloj frente al resto de clubes por llevarse a los mejores jugadores para contentar a Diego Pablo Simeone.