Está siendo un mercado de fichajes muy movido en el Atlético de Madrid, sobre todo con la entrada del mes de agosto. Los rojiblancos, tras oficializar a Sorloth y Le Normand, se lanzaron a por Connor Gallagher y Julián Alvarez. Este último fue anunciado ayer, pero el inglés parece que tendrá que esperar.
Su fichaje iba vinculado con la llegada de Samu Omorodion al Chelsea, pero los ingleses lo han echado para atrás en el último momento. Gallagher, que estaba en Madrid, ya ha vuelto a Londres para esperar allí mientras su futuro se resuelve. Joao Félix podría entrar en la operación, en sustitución de Samu, pero de momento, no hay nada claro.
Preocupación para Rubén Baraja
Esta situación ha llevado a que el entrenado del Valencia, Rubén Baraja, esté sumamente preocupado por uno de sus jugadores. La semana pasada, cuando Gallagher no se decidía, el Atlético de Madrid cerró el fichaje de Javi Guerra. Acordó las cifras con Peter Lim y el jugador ya estaba preparado para viajar a Madrid para firmar su contrato.
Finalmente, Gallagher dio el visto bueno a la oferta del Atlético de Madrid y Gil Marín echó para atrás una operación que ya estaba hecha. Estas fueron grandes noticias para Baraja, pues se aseguraba que una de sus estrellas se quedara, al menos, un año más. Sin embargo, con las dificultades que está poniendo ahora el Chelsea, vuelven las preocupaciones en Valencia.
Simeone sabe que tienen el visto bueno de Peter Lim y de Javi Guerra, por lo que no se descarta que se vuelva a activar esta opción. Intentarán cerrar a Gallagher en los próximos días, pero el inicio de LaLiga está a la vuelta de esquina y el técnico argentino quiere su plantilla cerrada.
Baraja sabe la situación
Rubén Baraja es conocedor de que el Valencia ya no es lo que era hace años. Ahora son más bien un club vendedor, por lo que sus estrellas difícilmente durarán varios años jugando allí. Sabe que si el Atleti decide activar el fichaje de Javi Guerra de nuevo lo harán, pero de momento está centrado en la pretemporada.
La prioridad de Simeone es Gallagher, por el perfil de jugador que es, pero Guerra gusta mucho en el Atlético de Madrid. El técnico argentino firma la salida de Joao Félix para que llegue el inglés, pero el Chelsea no paga lo que Gil Marín quiere. En los próximos días podremos ver como se termina cerrando este culebrón.