Rubén Uría, periodista de ElDesmarque, ha puesto sobre la mesa una verdad incómoda sobre Joao Félix, un jugador cuyo fichaje por el Atlético de Madrid no ha salido como muchos esperaban. La llegada del portugués en 2019 por 127 millones de euros fue vista como un movimiento revolucionario para el club colchonero. Sin embargo, cinco años después, el panorama es muy distinto.
Uría señala que uno de los principales problemas fue la falta de sintonía entre el estilo defensivo y físico de Simeone y el perfil creativo y ofensivo de Joao Félix. Desde el principio, las expectativas eran enormes, y aunque Joao tuvo destellos de brillantez, nunca logró consolidarse como el jugador decisivo que el club había imaginado.
Las palabras de Joao Félix, el punto de ruptura
Según Rubén Uría, una de las claves del fracaso de Joao Félix en el Atlético de Madrid fue su propia falta de conexión con el proyecto del club. Las declaraciones del portugués antes de su cesión al Barcelona en 2023 fueron el punto de no retorno. Joao expresó públicamente su deseo de jugar en el Barcelona, calificándolo como su "sueño desde pequeño".
El paso de Joao por el Barcelona no cambió mucho las cosas. Aunque tuvo buenos momentos, el delantero nunca terminó de cuajar ni de cumplir con las altas expectativas que lo rodeaban. Tras su regreso al Atlético, la situación se volvió insostenible, y tanto el club como el jugador comenzaron a buscar una salida definitiva.
Simeone y la Incompatibilidad con Joao Félix
Diego Simeone siempre ha sido conocido por su enfoque táctico riguroso y su preferencia por jugadores que encajen en su sistema de trabajo. En ese sentido, Joao Félix siempre pareció una pieza fuera de lugar en el esquema del Cholo. Rubén Uría resalta que, a lo largo de los años, Simeone y Joao Félix nunca lograron encontrar una sintonía adecuada.
Esa falta de compatibilidad se vio reflejada en las decisiones de Simeone, quien a menudo relegaba a Joao al banquillo en partidos importantes. Esta situación provocó una frustración creciente en el delantero, quien no dudó en manifestar su deseo de salir del club para buscar oportunidades donde pudiera sentirse más cómodo en el campo. El primer intento de ruptura fue su cesión al Chelsea, donde tampoco logró asentarse.
El futuro de Joao Félix y el golpe a las expectativas
Rubén Uría señala que, para Joao Félix, el verano de 2023 fue decisivo. Después de su regreso del Barcelona, el jugador sabía que no tenía futuro en el Atlético de Madrid. Las palabras y actitudes que había mostrado en el pasado pesaban demasiado y habían erosionado cualquier posibilidad de redención. La tensión entre Simeone y el jugador era evidente, y ambos sabían que lo mejor era una separación definitiva.
Finalmente, el destino de Joao será nuevamente en el Chelsea, en una operación en la que los ingleses pagarían alrededor de 50 millones de euros. Joao Félix se despide del Atlético dejando un sabor agridulce. A pesar de su talento innegable, su paso por el club quedará marcado como un fichaje que, a ojos de muchos, nunca debió realizarse.