La salida de Mario Hermoso del Atlético de Madrid rumbo a la Roma ha generado un gran revuelo. Las declaraciones del excentral colchonero al aterrizar en la capital italiana, donde comparó la pasión de las aficiones del Atlético y la Roma, han dejado sorprendidos a muchos.
Por suerte, el Atleti cuenta con Le Normand como nuevo central estrella, así como Lenglet en la plantilla.
Hermoso se despide con sorpresa en el aire
Mario Hermoso, que firmó por la Roma como agente libre tras no renovar con el Atlético de Madrid, ha dejado un legado importante en el conjunto rojiblanco. El defensa madrileño, que jugó 174 partidos y anotó 10 goles bajo las órdenes de Simeone, se convirtió en una pieza fundamental en los esquemas del técnico argentino. Sin embargo, tras varios meses de negociaciones para su renovación, no se llegó a un acuerdo, lo que llevó al jugador a buscar un nuevo destino en la Serie A.
En sus primeras palabras como nuevo jugador del equipo ‘giallorosso’, Hermoso sorprendió a muchos al destacar lo sencillo que fue para él tomar la decisión de mudarse de Madrid a Roma. "Para mí era un cambio de vida sencillo respecto a mi vida en Madrid, con mi familia y con lo que quería yo a nivel deportivo", explicó Hermoso. Esto dejaba entrever que el desafío que buscaba no lo encontraba ya en el Atlético.
Estas declaraciones causaron un impacto inmediato entre sus excompañeros y la afición colchonera. Koke, como uno de los líderes del vestuario, no tardó en reaccionar con sorpresa. Aunque no se ha pronunciado públicamente, fuentes cercanas al club indican que la salida de Hermoso dejó un vacío importante en la defensa.
Simeone y el reto de reemplazar a Hermoso
La salida de Mario Hermoso supone un desafío importante para Diego Simeone, quien confiaba en la experiencia y polivalencia del defensor madrileño. A lo largo de las temporadas, Hermoso se ganó la confianza del técnico por su capacidad para jugar tanto de central como de lateral izquierdo.
Con su marcha, Simeone deberá buscar alternativas para reforzar la defensa, algo que ya estaba en los planes tras la llegada de Clement Lenglet. Sin embargo, la pérdida de un jugador que llevaba tantos años en el club y estaba adaptado al esquema defensivo supone un reto añadido para el técnico argentino.