El encuentro arrancó con un cuadro local algo más propositivo, buscando tener el control de la pelota desde los primeros compases. El Betis, por su parte, aspiraba a salir con velocidad, tratando de exprimir las posibles grietas que tuviera en defensa el cuadro de Arturo Ruiz. Ajibade fue una de las grandes protagonistas en este inicio, tratando de provocar fallos en la zaga verdiblanca, que empezaba a tener problemas para contenerle.
Esta primera fase se caracterizó por el dominio madrileño, que no quería quitar el pie del acelerador. Xénia, en el interior del área, tuvo una de las ocasiones más claras de las rojiblancas, pero su disparo, de forma incomprensible, se fue muy desviado de la meta rival. Vizoso, con una salida de puños, inquietó ligeramente a su equipo, que no estaba saliendo demasiado de su propio campo.
El Atlético, dominador, pero sin demasiado acierto
Con el paso de los minutos, el conjunto colchonero, a pesar de controlar la situación, necesitaba dar algo más. Eso sí, en algunos momentos, el Real Betis, que buscaba dar la sorpresa, conseguía escapar de la presión y generar algunos problemas a la defensa de Lola Gallardo.
Por ello, las de Ruiz debían estar muy atentas a lo que sucedía en las dos áreas. Ya que de ello dependía de que pudieran auparse a la cuarta posición.
Las de Joseba Aguirre se fueron animando, y, en un momento dado, llegaron con cierta facilidad al área contraria. Las rojiblancas, por su parte, necesitaban volver a generar cierta incomodidad en la defensa verdiblanca, que se estaba creciendo y empezar a sentir cómoda. Con las llegadas de Ludmila, el Atlético revivía sobre el césped, lo que volvía a poner en alerta al Betis.
Ludmila le da oxígeno al Atlético de Madrid
Este tipo de aproximaciones les volvieron a meter en la dinámica inicial, pero la precisión estaba brillando por su ausencia. Con un Betis cada vez más atrevido, el Atlético de Madrid no podía conceder un solo espacio si quería ganar el encuentro. El conjunto andaluz, muy sólido y ordenado en esta fase del duelo, no les permitían generar grandes ocasiones, lo que suponía un grave problema.
Finalmente, llegó la tan ansiada recompensa para el Atlético de Madrid en un encuentro complicado. Ajibade, en una jugada ‘marca de la casa’, supo desbordar a la defensa para internarse dentro del área, y, ahí estaba Ludmila. La brasileña, que vuelve a marcar con la camiseta colchonera, solo tuvo que empujar la pelota para estrenar el marcador y dar algo de aire a las de Arturo Ruiz.
Ajibade, muy activa, anota la segunda diana colchonera
Gracias a esta diana, el Atlético de Madrid recibió una importante dosis de confianza sobre el terreno de juego del Metropolitano. La afición estalló de alegría con el tanto anotado por su estrella ofensiva, que recupera puntería y da un paso adelante. No tardaron demasiado en conseguirlo, ya que Ajibade fue la encargada de anotar el 2-0.
Tras un buen balón filtrado, la delantera del Atlético de Madrid siguió exprimiendo las debilidades en defensa del Betis. Tras superar a su par, puso un balón cruzado al que no pudo llegar Vizoso, que, en cuestión de pocos minutos, recibió dos dianas. Esto le dio más tranquilidad todavía al conjunto colchonero, que necesitaba de estos estímulos.
Banini pone todavía más en ventaja al Atlético de Madrid
Las buenas noticias no dejaban de llegar para el cuadro local, que se estaba redimiendo. Estefanía Banini, que dio un paso hacia delante, fue la autora de la tercera diana local en el tramo final de la primera mitad. La argentina, tras un rechace propio, no tuvo demasiada oposición y colocó el 3-0 en el electrónico del Metropolitano, para algarabía de los más de 10.000 seguidores congregados en las gradas.
Esto supuso un chute de adrenalina para el Atlético de Madrid, que realmente necesitaba de un encuentro así para reivindicarse. Ante un Betis cada vez más hundido, las pupilas de Arturo Ruiz se hicieron definitivamente con el partido. Esto generó que la afición local disfrutara de un gran duelo de las suyas.
Rosa Márquez recorta distancias para el Betis en la segunda parte
Tras el paso por los vestuarios, la calma era la reinante en las gradas del estadio del Atlético de Madrid. El cuadro colchonero, a la vista del abundante y extenso resultado, no tenía prisa por llegar al área contraria, su objetivo era otro. Querían dormir definitivamente el encuentro, para culminar un gran día en la capital.
A pesar de esto, las colchoneras no cejaban en su empeño y seguían buscando poder ampliar su ventaja. Era un buen día para ellas, y querían brindarle una gran alegría a su afición, que estaba disfrutando de lo lindo en el Metropolitano. A pesar de esto, el Betis aguó ligeramente la fiesta cuando recortó distancias en el electrónico.
Rosa, con un buen disparo cruzado, fue capaz de batir a Lola Gallardo y bajar a dos los goles de ventaja que tenía el Atlético. A pesar de esto, las rojiblancas no dejaron que el cuadro andaluz pudiera crecer en el choque, tratando de ahogar las opciones que tuvieran.
El Atlético de Madrid no debía despistarse ante un mejorado Betis
La masa social colchonera no les dejaba de animar y el Atlético de Madrid quería corresponderles. A pesar del jarro de agua fría que supuso la diana bética, no dejaban de intentar acercarse al área defendida por Vizoso e intentar ponerle contra las cuerdas. Avanzaba la segunda parte, y, lejos, de introducir un bloque bajo, Ruiz no quería que sus jugadoras le perdieran la cara a un encuentro que tenían bajo control.
Debían prestarle más atención que nunca a la defensa, eso es cierto, pero no estaban sufriendo demasiado para sacar el balón jugado. Con todo, las de Aguirre seguían llegando, e incluso tuvieron un palo para intentar recortar todavía más las diferencias. Esto fue un notable golpe de atención para las de Ruiz, que necesitaba reaccionar en su peor momento del choque.
En el tramo final, a pesar de que el conjunto verdiblanco siguió apretando, el Atlético de Madrid siguió manteniendo la calma. No estaban siendo momentos sencillos para las colchoneras, que debían demostrar de lo que eran capaces sobre el césped de su estadio.
Sin embargo, en los últimos compases, no tuvieron demasiados problemas para conservar su ventaja. Sheila Guijarro, de cabeza, y prácticamente en la prolongación, sentenció de forma definitiva el choque. Esta fue una nueva gran noticia para un Atlético de Madrid que da un golpe de autoridad.
La diana visitante fue un espejismo, y pudieron conseguir tres puntos que son vitales. Cuando el encuentro agonizaba, llegó el turno de Lucía Moral, quien a placer puso el 5-1 definitivo. La lucha por la Champions se aprieta más que nunca, y el Atlético presenta sus credenciales.