El nivel de la defensa del Atlético de Madrid es un tema que se lleva analizando toda la temporada. Con 34 goles encajados en LaLiga, muchos más a lo que nos tiene acostumbrado el equipo de Simeone, es evidente que hay un problema. Esto se justifica con el bajo nivel de los defensores rojiblancos, entre ellos Savic, Hermoso o Reinildo.
En el caso del mozambinqueño, realizar un análisis de su rendimiento está condicionado por la lesión que sufrió la temporada pasada. Y es que, después de casi un año de su rotura del ligamento cruzado, Reinildo volvió a los terrenos de juego en diciembre. Su vuelta generó mucho entusiasmo en el aficionado colchonero, pues confiaban en que volviera al nivel que le colocó como uno de los mejores defensores.
A pesar de ello, y lejos de la realidad, Reinildo no está teniendo un regreso nada fácil. Tuvo buenos partidos, pero si algo caracterizó al defensor por encima de sus compañeros en su primera etapa era la seguridad que transmitía. Ese sentimiento esta temporada, en cambio, no se está reflejando sobre el césped, de hecho, todo lo contrario.
Sus errores ante el Athletic e Inter, la sentencia
El estado de forma actual de Reinildo viene condicionado de dos errores en partidos claves para la temporada del Atleti. El primero de ellos, ante el Athletic en Copa, provocando el penalti que adelantaría la futura eliminación del equipo rojiblanco en San Mamés. El segundo, en Milán, fallando en el gol anotado por Arnautovic que, por suerte, terminaría remontando el Atleti en el Metropolitano.
Estas desconexiones son impropias del antiguo Reinildo, que era, posiblemente, el defensa más seguro de la plantilla. Ahora, esos errores le han condicionado mucho a la hora de entrar en los onces titulares de Simeone. No obstante, el técnico argentino sigue confiando en él y no dudó, aprovechando la lesión de Hermoso, de colocarlo de titular ante el Barça.
Desgraciadamente para el mozambinqueño, posiblemente fue el peor partido del Atlético de Madrid en el Metropolitano en lo que llevamos de temporada. Él tampoco se salvó, pues fue superado por sus rivales en varias ocasiones. A día de hoy es una incógnita si su bajón de rendimiento se ha producido a raíz de la lesión, aunque es lo más probable.
Y es entendible, pues no es fácil recuperarse de una lesión como la de Reinildo y que le ha apartado 273 días del fútbol. A pesar de ello, es evidente que en el Atlético preocupa, pues es un jugador que, además de tener 30 años, acaba contrato en 2025. En este sentido, Miguel Ángel Gil, Simeone y Berta deberán valorar el futuro de Reinildo, quien parece que ha perdido peso en el once.