Este domingo, el Atlético de Madrid de Diego Simeone visitará Son Moix para enfrentarse al Mallorca en un partido que retrotraerá al técnico a tiempos no muy buenos. Este estadio fue el escenario de uno de los momentos más complicados de su carrera al frente del Atlético. El 9/04/2022, el equipo rojiblanco sufrió una dolorosa derrota por 1-0 en este estadio, un revés que Simeone considera uno de los puntos más bajos de su carrera.
Aquella derrota dejó al Atlético al borde de quedar fuera de los puestos de clasificación para la Champions y sumido en una crisis importante de juego y confianza. Simeone no ha olvidado esa etapa difícil y, en varias entrevistas, la ha catalogado como la peor de su mandato en el club madrileño. Aquella etapa pre-mundial fue la más negra como entrenador del Atlético de Madrid y casi supuso su adiós definitivo.
Una racha nefasta
La derrota ante el Mallorca fue un duro golpe que dejó huella, tanto en el técnico como en la plantilla. Los rojiblancos venían de perder partidos clave en la Liga y Champions, lo que generó una crisis que encendió las alarmas en el club. El equipo parecía desconectado, sin la intensidad y solidez defensiva que caracteriza el estilo de Simeone, y los rumores sobre su posible salida comenzaron a ganar fuerza paulatinamente.
Dos años después, el Atlético llega a este partido en una situación mucho más favorable. Tras tres victorias consecutivas, el Atlético de Madrid llega con la confianza renovada, sobre todo, después de la última de todas sobre la bocina contra el PSG de Luis Enrique. "Hay que seguir la idea" decía Simeone una vez acabado el partido de Champions y eso es o que buscan los rojiblancos hacer en Mallorca.
Para ello, contará con el alta de dos jugadores importantes para la plantilla como son César Azpilicueta y Marcos Llorente, recuperados ambos de lesión. Otra alta con respecto al último partido es la de Jose María Giménez, que fue baja por sanción contra el equipo parisino. El Atlético parece estar en esa senda de reencuentro con la idea que tantas alegrías le ha dado.
El Mallorca de Arrasate no regala nada
El Mallorca, por su parte, llega al encuentro con ganas de sumar puntos para seguir en la parte media de la tabla. El equipo balear ha demostrado ser un rival muy complicado en su estadio, donde se caracteriza por una defensa sólida y un juego físico que puede dificultar a cualquier equipo. Además, el recuerdo de la última victoria ante el Atlético en Son Moix les dará un extra de confianza para intentar repetir la hazaña.
Para Simeone, ganar este partido significaría cerrar un capítulo amargo en su carrera, donde de sus últimas tres visitas, solo ha ganado una. El técnico argentino necesita consolidar aún más la recuperación de un Atlético que aspira a estar en lo más alto de LALIGA. La visita a Mallorca es una oportunidad para el equipo de demostrar que las lecciones del pasado están aprendidas y que hoy están listos para enfrentar cualquier reto.
Este domingo, los rojiblancos no solo buscarán los tres puntos, sino también una especie de redención que les permita dejar atrás ese oscuro episodio y mirar al futuro con optimismo. Empatados a puntos con el Real Madrid, con un partido más, en buena posición en Champions y en la siguiente ronda de Copa del Rey. Como siempre, habrán de ir partido a partido.