Joven futbolista con chaqueta blanca frente al escudo del Atlético de Madrid

Problema inesperado con el fichaje de Thiago Almada: el Atlético busca una solución

El argentino ya es oficialmente nuevo jugador rojiblanco, pero su llegada ha provocado un contratiempo

El Atlético de Madrid  sigue moviéndose con determinación en el mercado, reforzando su plantilla con jugadores jóvenes, talentosos y con proyección. Uno de los últimos en aterrizar ha sido Thiago Almada.

Una de las grandes promesas del fútbol argentino y un  fichaje estratégico por parte del club. A sus 23 años, el exjugador de Atlanta United encaja en el nuevo plan deportivo impulsado desde los despachos del Metropolitano.

Jugador de fútbol con la camiseta de Argentina celebrando en el campo.
Almada nuevo fichaje del Atleti | Europa Press

Sin embargo, su incorporación ha generado un efecto colateral que complica la planificación rojiblanca. Más allá de lo estrictamente deportivo, la llegada de Almada ha activado un escenario administrativo  que exige acción inmediata por parte de la dirección deportiva. El club ha superado el límite de plazas disponibles para futbolistas extracomunitarios.

Tres jugadores para dos plazas

Actualmente, el Atlético cuenta con tres jugadores que ocupan esa condición:  Samuel Lino, Nahuel Molina y Conor Gallagher. Y solo dispone de dos cupos para inscribir a extracomunitarios. Por tanto, uno de ellos tendrá que salir  o quedar sin ficha en el arranque del curso.

La situación no pilla por sorpresa a los responsables del área deportiva, pero ahora se ha convertido en una prioridad. Lino, que fue una de las grandes revelaciones del curso 22/23. Pero  ha bajado su rendimiento desde entonces, es el principal candidato a abandonar la plantilla.

Dos jugadores de fútbol en acción durante un partido, uno con uniforme azul y rojo y el otro con uniforme gris, en un estadio iluminado.
Conor Gallagher con el Atlético de Madrid | Europa Press

Su juventud, contrato vigente hasta 2027 y buen cartel internacional lo convierten en una opción viable para hacer caja. Sin embargo, el futbolista aún no ha dado pasos claros hacia una salida, pese al interés de clubes como el Nottingham Forest.

Un rompecabezas con fecha de caducidad

Gallagher también está en el mercado. Su caso es más complejo: llegó por 40 millones desde el Chelsea y el club quiere recuperar la inversión. Algo que limita su salida a equipos de la Premier con músculo económico.

Mientras tanto, el caso de Nahuel Molina es el más estable. Simeone cuenta con él y, además, el lateral está en proceso de conseguir la nacionalidad española, algo que podría resolverse en enero. Aun así, si llega una buena oferta, su continuidad también se podría poner en duda.

El reloj avanza y el Atlético necesita liberar una plaza. Almada ya es rojiblanco, pero su fichaje obliga a mover ficha.