Imagen de Rodrigo de Paul en un partido en el Metropolitano

Rodrigo de Paul comanda un titánico esfuerzo de un Atlético sin premio ante el Girona

Un gol en el tiempo de descuento del Girona condena a un Atlético que se mereció más, especialmente en la segunda parte y sus opciones de pelear por LaLiga se han evaporado en el encuentro celebrado en Montilivi

El partido no pudo empezar peor para el Atlético de Madrid, que vio como el Girona se adelantaba a los pocos minutos. Tras un grave error defensivo, Valery, que no dudó en desbordar, decidió disparar desde el balcón del área. El lanzamiento del jugador del conjunto catalán no encontró oposición por parte de Jan Oblak, que encajó la primera diana del duelo.

El conjunto entrenado por Míchel, mucho más activo en los primeros compases, tenía el control de la pelota. El Atlético, por su parte, trataba de resistir, intentando salir a la contra cuando los locales cometieran algún error. Pocos minutos después, tuvieron su primera oportunidad, gracias a un remate de Mario Hermoso, que terminó atrapando sin problemas Gazzaniga, atento en todo momento.

El Atlético empieza a crecer, en busca del empate

Este remate supuso un cambio de tendencia sobre el terreno de juego, con un Atlético con ganas de generar ocasiones e intentar asediar al Girona. La intensidad de los rojiblancos creció, permitiendo recuperar el balón rápidamente. Solo de este modo, podrían sacar algo positivo los hombres de Simeone, que necesitaban poder igualar la contienda de forma veloz.

Poco a poco, el Atlético fue generando más llegadas hacia la portería del Girona, que se estaba hundiendo de forma ligera. Eso sí, el Girona no renunciaba a salir con la pelota jugada, mostrando su gran personalidad desde el primer minuto del encuentro. En esta fase del partido, los de Simeone crecieron sobremanera y buscaban con impaciencia poder empatar un choque que se les complicó.

Morata, con alguno de sufrimiento, iguala la contienda

Gracias a ese crecimiento, llegó la ansiada diana del empate de un buen Atlético de Madrid, que confirmaba así su paso adelante en el partido. Morata, aprovechándose de una buena prolongación de Griezmann, fue capaz de batir al meta del Girona, poniendo el 1-1 en el marcador. Eso sí, iba a tener algo de suspense, ya que dicha diana fue anulada en un principio por el colegiado.

La buena noticia para el cuadro colchonero y Morata es que, tras la revisión del VAR, el gol subió al marcador. De este modo, el Atlético pudo culminar, con algo de sufrimiento, su crecimiento sobre el césped de Montilivi, congelando a la afición de local. Los de Míchel se vieron sorprendidos por un equipo rojiblanco que se recuperó rápido del primer tanto del choque.

Morata resucita al Atlético y le mete de lleno en el partido

A los pocos minutos de saltar al terreno de juego, Álvaro Morata, esta vez sí, pudo culminar su ‘hat-trick’ en una de sus mejores noches. Tras una notable asistencia de Rodrigo de Paul, el delantero del Atlético pudo superar de forma impecable a la defensa local. La sociedad entre el delantero y el centrocampista estaba haciendo estragos, y los de Míchel no podían hacer nada para impedirlo.

Tras el tercer tanto, a pesar de que el Girona intentó salir de su zona para intentar incomodar, el Atlético tenía el control del choque. El duelo se convirtió en un monólogo, con el cuadro local intentando resistir las acometidas colchoneras, que no dejaban de aparecer. Eso sí, no debían despistarse, ya que los de Míchel podían adelantarse en cualquier momento.

Pasada la primera hora del partido, Dovbyk tuvo la ocasión más clara para el Girona en la segunda mitad. El delantero ucraniano, en un buen remate por bajo, intentó poner contra las cuerdas a Oblak, que tuvo que esforzarse para despejar su lanzamiento. De este modo, quedó claro que los de Simeone debían mantener la concentración en todo momento ante un peligroso Girona.

El Girona, aprovechando un error de Koke, se vuelve a adelantar

Lejos de hundirse tras anotar el gol del empate, el Atlético no dejaba de insistir en sus aproximaciones hacia la portería contraria. El encuentro, lejos de calmarse, parecía que se estaba convirtiendo en un correcalles, con las dos escuadras buscando romper la igualdad en el electrónico. Con el paso de los minutos, el Girona se pudo recomponer y recuperar el control de la posesión, con el objetivo de poder acercarse cuanto antes la meta de Oblak.

El paso adelante que dio el cuadro local en el terreno de juego puso en algunos problemas al Atlético, que debía respirar. Ese crecimiento culminó en el segundo gol de los de Míchel, que volvían a adelantarse en el marcador. Koke cometió un grave error, y de eso se aprovechó Savinho, que batió sin problemas a Oblak para poner el 2-1 en el electrónico.

Blind amplía la ventaja y ahonda en la crisis del Atlético 

Tras este duro jarro de agua fría, los de Simeone debían recomponerse cuanto antes para volver a meterse en el partido. Tras hundirse después de empatar, los rojiblancos volvieron a pagar caro uno de sus errores, lo que les hizo volver al punto de partida. En cambio, el Girona, lejos de retroceder, no dejaba de apostar por intentar asediar a la defensa rojiblanca en los últimos minutos del primer tiempo.

De forma gradual, el Atlético volvía a salir de su propio campo, intentando poner el miedo en el cuerpo a su rival. De hecho, en una de sus llegadas, los colchoneros reclamaron una posible mano cometida por Eric García que el colegiado no consideró como penalti. Sin embargo, lo peor estaba por venir para un Atlético que no era capaz de reaccionar y seguía naufragando en Girona.

Tras el lanzamiento de un saque de esquina, llegó la tercera diana para la gran sorpresa de LaLiga. Daley Blind, aprovechándose de una prolongación en el área rojiblanco, pudo adelantarse a sus rivales y anotar el 3-1, para euforia de Montilivi. El central amplió la ventaja de los de Míchel, que estaban siendo muy superiores a los de Simeone.

Morata revoluciona el partido y casi cierra la primera mitad con un empate

Apenas unos minutos después, antes del descanso, el Atlético demostró que el encuentro no estaba perdido. En los últimos compases de la primera mitad, el cuadro rojiblanco pudo recortar distancias, helando en parte a la grada de Montilivi. Morata, por segunda vez, volvía a meter a los de Simeone cuando menos se lo esperaban, tras desdoblar a la defensa catalana.

El partido estaba siendo de emociones fuertes, y, pocos segundos después, Morata estuvo a punto de culminar un ‘hat-trick’. Tras una buena jugada colectiva, el delantero volvía a batir a Gazzaniga, pero el VAR anuló la diana del punta del cuadro colchonero. De este modo, la primera parte, que pudo acabar en empate, terminó con una pequeña renta del Girona.

Un Atlético muy intenso asedia al Girona en el inicio del segundo tiempo

Tras el paso por los vestuarios, el encuentro, lejos de bajar el ritmo, mantuvo la misma intensidad. El Atlético tuvo la primera gran ocasión de la segunda mitad, cuando Morata, de cabeza, conectó un gran centro lateral de Rodrigo Riquelme. Los rojiblancos avisaron de nuevo, gracias a un buen disparo de Griezmann, que quería igualar la contienda de forma urgente.

La mejora del cuadro de Simeone fue notable, y no dejaba de aproximarse hacia la portería contraria, en busca del tercero. El francés, con un espectacular remate desde el suelo, puso en problemas al meta rival, generando un saque de esquina. Era un completo asedio por parte del Atlético hacia el Girona, que estaba atravesando su peor fase durante el encuentro en su feudo.

La mejor versión colchonera puso contra las cuerdas a los de Míchel, que no eran capaces de salir de su propio campo. No dejaban de llegar los rojiblancos, que debían afinar la puntería si querían conseguir el tan ansiado tercer tanto en el partido. No tardaron demasiado los de Simeone en conseguir la igualada en un duelo que había perdido el control.

El Girona, en el descuento, obra el milagro y se lleva el partido

En el tramo final del encuentro, ambos equipos quisieron ir con todo, agotar sus cartuchos para romper la igualada. El Atlético no dejaba de intentarlo, y mostrando una gran personalidad, tuvo ocasiones hasta el final para llevarse el partido. Sin embargo, los minutos pasaban y sus opciones de victoria se evaporaban en paralelo a que el choque se tranquilizó.

Sin embargo, el esfuerzo de los de Simeone fue en vano, ya que el Girona, en el tiempo de descuento, se encontró con el gol. Iván Martín, tras recoger un buen pase de Portu, pudo batir a Oblak en un extraño gol que hizo saltar a todo Montilivi. Con esta diana, el Atlético se congeló y no pudo remontar un duelo que le ha descartado prácticamente en la lucha por LaLiga.